El equipo del Ingeniero mantuvo el equilibrio y el 0-0 hasta el minuto 65´y ahi surgió el astros francés con un doblete para cambiar la historia del partido
Por fin. Kylian Mbappé abrió su cuenta como madridista en LaLiga y en el Bernabéu, para resolver un partido que se complicaba por momentos. Mediada la segunda mitad, con la amenaza de un Betis creciente, descorchó el champán con un remate de zurda efectivo, por bajo. La foto es suya, y el mérito de Federico Valverde, autor de un taconazo espléndido para habilitar al francés y de un partido monumental, repleto de calidad y liderazgo. Sufrió el Madrid ante un buen rival que tuvo sus momentos, pero sin capacidad para aprovecharlos.
El Madrid fue más dominante y equilibrado que en sus anteriores encuentros. Pudo parecer un guiño por la visita del Betis y el interés hasta el último dia de mercado por Dani Ceballos, pero la presencia del utrerano en el once tenía todo el sentido. En un equipo escaso de juego en sus primeros tres partidos es necesario un centrocampista más. Puro. Que conozca el oficio. Y sí. El Madrid fue más compacto, más fluido, sin exagerar tampoco. Ante un adversario más armado que los tres anteriores, dominó más y sufrió menos, aunque la velocidad del juego sigue siendo de pretemporada. Y hay que espabilar, que el Barça lleva 12 puntos y juega a toda pastilla.
El Betis tampoco es lo que era. Con la baja provisional de Isco y la definitiva de Fekir, tiene que reconstruirse. Al Ingeniero Pellegrini no le faltan recursos, como colocar a Aitor Ruibal de ariete o situar a Rodri, transferible hasta el viernes pasado, con libertad en ataque. Esos condicionantes no impidieron a los verdiblancos, que suelen sacar tajada en el Bernabéu, amenazar de inicio con un remate cerca de la escuadra y una llegada de Ruibal que taponó Rüdiger en área pequeña. No generaron muchas más llegadas claras, pero defendieron con seriedad y apenas concedieron errores en zonas de riesgo.
Es curioso, pero la ansiedad puede afectar a cualquiera. Incluso a Kylian Mbappé. No le falta sólo finura, que le falta, o un socio que le entienda los desmarques, que aún no lo encuentra. Es que si encuentra posiciones claras toma decisiones incorrectas.Recorta y tarda en tirar. Se la da para el lado que no debe. Recibió dos balones de los suyos, en el extremo izquierdo, para encarar. Los dos se los taponaron. Llega a contagiar al equipo, que le busca para que desbloquear al francés y pasar a la siguiente pantalla. como Carvajal, que al filo del descanso le metió un centro de exterior magnífico y cuando el 9 se relamía, Sabaly le rebañó la presa.
Subió un punto la intensidad el Madrid tras el descanso, lo que implica que los blancos no van con todo de inicio. Se instaló en campo contrario y merodeó el área con peligro. Probó Vini desde lejos, remató al palo y el rechace cayó solo a Kylian, que falló lo infallable. Poco después maniobró bien por la izquierda Vinicius, un tormento para Sabaly, centró atrás y Mbappé tardó lo justo en armar el tiro para que se le echaran encima los defensores. Para agravar la sensación, Pellegrini metió dos cambios que hicieron crecer a su equipo, Cardoso y Vitor Roque. Suficiente para generar un par de ataques notables que removieron el rumor del Bernabéu. Uno de esos puntos críticos que marcan temporadas.
El primer tanto de Mbappé alivió al Madrid, aunque no se aligeró del todo la tensión, en parte por el enfado con Alberola. El árbitro había amonestado a Vinicius por protestar sin medida y se contuvo después cuando el brasileño arengó a las masas. El caso es que poco después Vini encaró mano a mano con Rui Silva y no quiso pitar penalti. Parecía señalar fuera de juego, pero no lo decía así su linier. El caso es que en el VAR le llamaron y tuvo que señalar el derribo. Esta vez no fue Vini el lanzador. Por decisión del técnico, se supone. Lanzó Mbappé y completó un doblete balsámico. Para él y para un Madrid que se va al parón sufriendo, como anunció su entrenador, para sacar el partido adelante. A la espera de la frescura y el fútbol, bien está mantener las distancias con el líder.
/Escrito por José Ma Rodríguez para Marca de España
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