Tanto periodistas como hninchas aseguran que el xeneise no tiene nada que envidiarle a River Plate en cuanto a refuerzos y que está para pelear y ganar todo lo que va a jugar
Ahora sí. El plantel de Boca, en su integralidad, tiene mucho más que ver con su historia, con la exigencia que marcan sus hinchas, con el “Deportivo Ganar Siempre” que está en su ADN: este mercado multiestelar, definitivamente, lo puso otra vez en la vidriera de la competitividad, un sitial que nunca debió abandonar pero que, errores dirigenciales mediante, fue dejando atrás progresivamente hasta quedar expuesto en el último año
Como prueba basta un botón: proyectado un equipo ideal de Gago, ningún refuerzo del último libro de pases sería titular indiscutido. Eso no significa que ningún futbolista tenga valor, ni que no puedan contribuir en los meses siguientes, pero sí marca que ese mercado de mitad de 2024 se quedó corto de jerarquía, algo que éste de inicios de 2025 vino a solucionar y con creces.
LOS REFUERZOS DE BOCA EN ESTE MERCADO 2025
Rodrigo Battaglia, Ander Herrera, Alan Velasco, Williams Alarcón, Carlos Palacios y Ayrton Costa marcan una clara diferencia. Con la excepción quizá en este último caso, todos llegaron para ponerse la camiseta y jugar. Por actualidad, jerarquía y peso propio, no necesitan presentación, y así Boca dio un golpe sobre la mesa, con refuerzos que no tienen nada que envidiarles a las incorporaciones de River, con todo y sus campeones mundiales.
Con lo que hay más lo que había, con los Cavani y los Rojo, los Saracchi y los Advíncula, los Merentiel y los Zenón, los Zeballos y los Figal, el equipo de Gago está en condiciones de pelear fuerte y en todos los frentes. Lo pone en la vidriera de los candidatos a pelear la Copa Libertadores (aunque arranque en el sótano de las fases preliminares), pica de favorito en el torneo local y está en condiciones de plantarse ante cualquiera en el Mundial de Clubes, después se verá para qué le da, en tal caso, ante rivales europeos top.
LAS POSIBILIDADES DE GAGO PARA ARMAR EL EQUIPO
Ahora bien, y hablando de Gago, habrá que ver cómo combina los nombres, qué maridaje imagina de acuerdo a sus preferencias tácticas, tan modificables en su tendencia según el estilo del rival de turno. Entonces, ¿es posible armar un 11 ideal? Es un juego interesante, sobre todo para medir la potencialidad de este equipo. Tomando como base el 4-3-3 que suele utilizar el entrenador, sale una formación base que impacta. Y de ésta se desprenden otras combinaciones con distintos esquemas tácticos. A jugar.
Por lo pronto, el arquero, hoy, sería Leandro Brey (aunque Javi García es muy considera por Gago), pero vale la licencia de proyectar ya en ese lugar a Agustín Marchesín, quien en los próximos días podría incorporarse a Boca como ¿último? refuerzo.
Después, habría que ver qué sucede con Leandro Paredes, el fichaje estrella que Boca se ilusiona con cerrar como broche de oro, pero al mediocampista de la Selección preferimos no incluirlo porque su llegada es más improbable, aunque no imposible.
DESDE EL ARCO HASTA LA DELANTERA
Entonces, si Marchesín es el arquero, la línea de cuatro bien podría estar conformada con Advíncula (Blondel alternativa), Battaglia, Rojo y Saracchi (también con mucho recambio ahí). Battaglia viene de jugar en la zaga en Mineiro (aunque en linea de tres/cinco) y podría ser el compañero de Marcos Rojo hasta que se recupere Figal (ambos lesionados actualmente). De todas formas, su polifuncionalidad le permite ser alternativa atrás o como volante central.
Del medio hacia adelante, ahora sí, se abre un abanico de posibilidades y combinaciones. Pero bien podría ser un mediocampo con Zenón, Herrera y Palacios /Alarcón, y una delantera con Velasco, Cavani y Zeballos. Nada mal, ¿no? Con Battaglia eventualmente de cinco, el equipo gana en firmeza y anticipo en la marca, algo clave para un equipo que gusta presionar alto como los de Gago.
Ahí se verá quién debería salir, y ahí entrará a tallar los niveles individuales y lo que busque el entrenador para cada partido. En la delantera, es interesante la posición de Velasco, que parece ser más funcional ahí dada la idea de Gago de que los extremos se cierren para conectar con los volantes. Si bien la tendencia del Changuito es hacia el desborde, el ex Independiente se mueve ahí como pez en el agua. Y Boca tendría dos gambeteadores seriales para asistir a un Cavani que sigue en modo crack.
Del mismo modo, aparecen otras combinaciones igual de interesantes según el esquema que utilice Gago. Para el 3-4-3, que usó en el amistoso ante Juventude en San Nicolás, podría utilizar a Marchesín; Lema, Battaglia, Rojo; Blondel Herrera/Alarcón Palacios/Zenón, Blanco/Saracchi; Velasco, Cavani, Zeballos. Y en el módulo más sencillo, el clásico 4-4-2 podría poner a Marchesín; Advíncula, Battaglia, Rojo, Fabra; Zenón, Herrera, Alarcón, Velasco; Cavani y Zeballos. Para todos los gustos, para todos los esquemas, este Boca cambió para mejor.
Ahora sí. Hay Equipazo.
/Escrito por Pablo Ramón para Olé
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