Un gol extremadamente tempranero (11 segundos de juego) abrió las puertas para una importante victoria de Ñublense. Porque, si bien Huachipato emparejó las cifras y el juego, al final los chillanejos establecieron diferencias claras y sumaron tres puntos valiosos en su intento por alejarse de las posiciones bajas de la tabla.
CHILLÁN.- Cuando el equipo llegó al estadio Bicentenario de Chillán, Sebastián Varas no ingresaba como titular en la formación de Ñublense. El delantero sufrió un golpe en el entrenamiento del jueves y su rodilla no se había deshinchado. Sin embargo, cuando Ivo Basay se disponía a dar su charla técnica, Varas se acercó al técnico y le pidió probar en el calentamiento: «Siento dolor, profe, pero todavía quiero jugar».
Y jugó. Con tanto acierto, que a los 11 segundos aprovechó un despeje corto de Muñoz y sacó un remate bombeado que se clavó a espaldas de Reyes y significó no sólo la apertura de la cuenta, sino que seguramente será el gol más rápido del Clausura y uno de los más tempraneros del fútbol chileno.
Reaccionó, sin embargo, Huachipato. No se amilanó el conjunto acerero por ese gol de camarín. Comenzó a tomar protagonismo Carlos Espinoza, bien secundado por Pontoni, Povea y Elgueta y la pelota pasó a propiedad del conjunto visitante.
Por lo mismo, no extrañó que a los 16´empatara Andrés Vilches, culminando una serie de rebotes frente al arco de Frascarelli. Desde el banco se insinuó un reclamo por presunta posición adelantada del goleador, pero wl uruguayo Riquero había quedado caído en la punta del área y con ella habilitaba a todos los contrarios.
Hasta el final del primer tiempo, siguió jugando mejor Ñublense y el meta local tuvo un par de tapadas que permitieron mantener el empate en uno.
¿Porqué cambió el partido en el segundo tiempo? Por el ingreso de Gabriel Rodríguez. El rioplatense sustituyó a Octavio Pozo y de inmediato se hizo notar en la cancha.
De hecho, un remate suyo que no pudo contener Reyes permitió el empalme de frente de Croce para el 2-1 (59 minutos del partido) y cuatro minutos más tarde, recibiendo una buena habilitación de Cisternas, Rodríguez desbordó por derecha y su centro rasante lo empalmó de primera el «lesionado» Varas, para clavar la pelota junto al travesaño.
Así, se definió un partido en que como debutante tuvo sólo a Hugo Vilches en la banca de Huachipato (llegarían a Ñublense el delantero Damián Salvatierra (proveniente de Acasusso de Argentina) y a Huachipato, Juan Ignacio Duma, sin posibilidad de jugar en Universidad de Chile).
La satisfacción lógica en Ivo Basat y su gente, porque saben que ganando puntos como local pueden llegar a puerto sin mayores peligros. E intranquilidad en el conjunto acerero, donde Vilches dejó a mediados del Apertura la banca de Barnechea porque lo vió condenado al descenso y ahora resulta que los de la precordillera pueden perfectamente salvarse y Huachipato no las tiene todas consigo, porque los puntos que los separan de los últimos son cada vez menos.
Facebook
Twitter
Instagram
YouTube
RSS