San Felipe dio anoche un tremendo salto que lo acerca al líder San Luis luego de vencer por 3-0 a Coquimbo Unido en el Valle de Aconcagua, mientras que el equipo aurinegro retornó a casa sumido en la crítica por el tercer revés consecutivo y por su peligrosa permanencia en la zona roja de la clasificación, aventajando sólo al colista Lota Schwager. Además y por si fuera poco, la comisión disciplinaria tendrá que resolver si el segundo portero Juan Segovia, se mantendrá en el equipo luego que el entrenador Víctor Castañeda no lo convocara en la citación por indisciplina.
SAN FELIPE.- El 3-0 final para el local, goles de Jaime Droguett a los 27’ y Leandro Sirino, a los 79’ y 90’ dejó en evidencia los momentos, virtudes y defectos de los protagonistas, ya que mientras San Felipe alza el sueño de luchar por el retorno a la serie de Honor, Coquimbo se sigue comprometiendo con el descenso y lucha por salvar la categoría.
Peser a la goleada la diferencia en los números no fue tal en un principio. Coquimbo Unido se aferró desde el primer minuto a tener el balón. Copó la zona media de marca con un tridente que desarrollaba bastante bien la faena de quite, ya que Jonathan Figueroa se sumaba a Pedro Cortés y Franco Seida, aunque no lograban tener la profundidad que esperaba el técnico Castañeda con sus hombres de ofensiva Leandro Torres con los puntas Monje y Fiorina.
Esta primera parte del juego no fue ninguna sorpresa para los aurinegros. San Felipe, en su afán de acordar las distancias con el líder San Luis (libre en esta jornada), salió desesperado en busca de controlar las acciones y tomar ventaja en el marcador y aunque le costó entrar hasta el arco del argentino Abraham pudo abrir el marcador en la primera media hora a través de Droguett, quien puso el desnivel con un disparo imposible de controlar para el meta.
En esa parte del juego equipo “pirata”, proveniente de dos derrotas consecutivas, abusó un poco de la tenencia y la falta de ritmo para sorprender a la última línea aconcaguiña salvo un testazo de Fiorina y un remate de Figueroa que pudieron darle mayor rédito.
Así como era de rápida la lectura que se hizo en la primera parte del compromiso, también fue previsible lo que vendría en los últimos 45’. El equipo “pirata” entró con mayor dinamismo a jugar encampo sanfelipeño, aunque los intentos de Castañeda por darle frescura a sus hombres de ofensiva no surtieron el efecto esperado.
San Felipe sacó adelante su tarea y dejó que Coquimbo se atreviera, saliera desde el fondo, arriesgara por esa paridad y lo liquidó a través del contragolpe con uno de sus mejores hombres Leandro Sirino, quien asestó el 2-0 en una rápida contra a los 79’, en lo que terminó siendo el golpe de nocaut para un plantel que nunca encontró la profundidad que su entrenador deseaba.
El tercero y ya en los descuentos, nuevamente en los pies del atacante uruguayo, sirvió para establecer una distancia que en la tabla se hace inmensa y que deja claro frente al tramo final del torneo que comenzará este fin de semana, que los aconcaguinos irán por la gloria del triunfo y los aurinegros tendrán que sufrir y luchar por salvar la serie.
Enojo de Castañeda
El jefe técnico de Coquimbo Unido no contó hasta 10 antes de enfrentar los micrófonos. Estaba molesto ciertamente por el resultado, tanto por los errores que cometieron sus jugadores. De hecho, responsabilizó directamente a uno de sus jugadores en el segundo tanto local y no salvó al cuidatubos Juan Segovia por sus actos indisciplinarios que provocaron no fuera llamado a la convocatoria.
“El error del segundo gol es básico, de escuela de fútbol, hasta el más neofito de los futbolistas sabe que cuando le ganan las espaldas al lateral, el central sale a cubrir hacia la banda, ese lateral tiene que hacer las veces de central y no lo hizo, apareció Sirino que estaba inspirado y nos hace el segundo gol que definió el partido, porque hasta ahí me pareció que estaba bien parejo. Terminamos con un 3-0 que parece fue goleada, pero hasta el momento del 2-0 estaba bien apretado”, explicó el entrenador.
El jefe técnico de los “piratas” reconoció que esta vez no fueron el equipo que en otras oportunidades ha dado vuelta resultados y trámites de juego, “esto provoca que estemos en la parte baja y no podamos salir del fondo, se nos está complicando, pero nuestro norte siempre ha sido salvar la categoría, sabiendo que el plantel es limitado en nombres”.
Respecto de la situación que afecta al portero Juan Segovia, al que marginó por acto indisciplinario, el deté precisó que “le dejé pasar varias y me estaba sintiendo incómodo con la situación, esto pasó de castaño a castaño oscuro, hay que tomar la decisión y asumir las consecuencias, veremos que es lo que pasa y rezar para que Abraham no le pase nada”.
Para el delantero argentino Alejandro Fiorina, el partido fue “parejo” y que el problema de Coquimbo es general “ni arriba, ni abajo, debemos trabajar para salir y confiar en el técnico”.
/Diario El Día de La Serena
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