El elenco altiplánico mostró un planteamiento que dejó mucho que desear, ya que la selección mexicana arribó a la Copa América con equipo alternativo, pero de igual manera fue el que más inquietó en el pleito.
Por Sebastián Alonso M.
smino@todofutbol.cl
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VIÑA DEL MAR.- El reconstruido Estadio Sausalito de la «Ciudad Jardín» fue testigo de su primer partido de Copa América. Duelo en el que se enfrentaron el combinado de México, ante la Selección de Bolivia.
Esta última escuadra, intentando volver a los triunfos en el certamen continental, lo cual, no consiguen desde 1997, en una copa que se organizó en el país altiplánico. Sin embargo, y aunque México arribó a Chile con equipo b, el conjunto azteca generó más peligro de cara al pórtico del golero Quiñones, con una Bolivia quedando al debe en su debut.
En la primera mitad todo resultó ser de mucho estudio entre ambos equipos, pero fueron los aztecas quienes tomaron la iniciativa y se fueron primero en demanda del pórtico rival, primero con un remate desviado de Medina y posteriormente con una arremetida de Flores.
No obstante, en el complemento, los bolivianos emparejaron las acciones gracias a dos de sus más destacables figuras, quienes comenzaron a combinar de buena manera para generar peligro en el arco de José Corona. Chumacero y Moreno-Martins asociaron buenas jugadas, pero siempre sin fortuna, de echo, el delantero se apuró en más de una ocasión en definir la jugada, por lo que los balones se iban de la cancha sin ser el pórtico su destino.
Magro empate entre Bolivia y México que deja a Chile como absoluto líder del Grupo A con tres unidades, segundos Bolivia y México con un punto cada uno y último del grupo el equipo ecuatoriano sin nada.
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