Un tiro de esquina provocaba la rápida salida de la selección peruana, y Diaz en el afán de que no avanzaran sube la mano y le pega al balón, con lo que se ganó la amarilla por parte del arbitro. Con el cobro realizado, el peruano Cuevas toma el balón y se lo lanza en la cara al «Mago» Valdivia, a dos metros del juez, lo que provocó la roja directa. Esto provocó el enojo de todo el equipo peruano con su compañero y también del estratega Gareca, quién ni siquiera alegó al arbitro dicha decisión.
Cabe destacar que los jugadores peruanos están un poco pasados de revoluciones y vez que pueden dejar el pie un poco más de la cuenta, lo dejan, para ver si pueden aprovechar alguna lesión o enojo de algún chileno.
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