El mejor del mundo y un pase histórico: le dijeron a Olé que este martes ya estaría en París, que está en ebullición.
El futuro del 10 está en Francia. «Todo está encaminado para que Leo viaje en las próximas horas, salvo una catástrofe», le confirmó en la madrugada europea a Olé una persona que pisa fuerte en la negociación. Y eso sería este martes mismo. Desde el entorno del jugador fueron en estas horas claros y más mesurados: no hay por qué apurarse ante una decisión de tanta envergadura. Desde hace días, abogados españoles están anclados en París con todos los puntos de un contrato que marcará un quiebre en la historia del fútbol mundial.Las charlas de Jorge Messi con los letrados son constantes. Por supuesto que la ansiedad se hizo como un muñeco de nieve de dimensiones desmesuradas y los hinchas bailan al compás de la velocidad de las redes sociales y de la información: se dijo que Messi viajaba este lunes con toda su familia a París. Y, a la fiel guardia periodística, se sumaron los fanáticos. Pero el argentino no se movió de su casa de Casteldefels. De hecho, se difundió el video de una cadena de TV británica con una gaseosa en la mano y el short de baño al borde de la pileta.
VIAJE A LAS ESTRELLAS
El astro viajaría este martes rumbo a Francia. Hay detalles del contrato que aún no se habían resuelto pero que estaban en camino. Y aprendió la lección más dura que le tocó pasar: tenía todo arreglado para seguir en el Barsa y, sin anestesia, le dijeron gracias por todo. Por eso irá directamente a firmar un convenio que esté resuelto al 100%. Si no está hoy, será mañana. Una de las versiones que circularon ante el retraso de su llegada era que estaba analizando dos ofertas, una del Chelsea y otra del Tottenham. Los Blues acaban de contratar a Lukaku y quieren otra Champions al hilo.
Aunque sería tentador, desde un primer momento Leo se sintió impulsado a ir a París. La cercanía con Cataluña es un punto de peso (está a una hora y media en avión), el proyecto deportivo del PSG con un equipo minado de estrellas, muchas de ellas íntimos amigos de la Pulga, es algo que moviliza. Y también pensó en la parte familiar: las parejas de Di María y Paredes (están convencidos de que serán compañeros de Messi) se conocen con Antonela, tienen hijos y eso haría que la mudanza resulte menos traumática para una familia Messi que hizo su toda su vida en Barcelona y que, como el 10, pretendía quedarse en España.
/Ole
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