Es un resultado tal vez injusto, porque Argentina llegó muy poco al arco de Chile, pero aprovecho las dos ocasiones que tuvo ante un Bravo que luego salió por lesión. La Roja dominó casi todo el partido, pero sólo tuvo en Ben Brereton el único jugador que pudo haber cambiado la historia.
Esta noche sí que la clasificación se ha puesto muy cuesta arriba. Porque no sólo perdió Chile ante Argentina, sino que ganó Uruguay en Paraguay y de esta forma, al concluir esta fecha FIFA en el día de mañana habrá dos selecciones clasificadas: Brasil y Argentina, otra que ya está casi lista como Ecuador y quedan sólo dos cuerdas para cinco trompos.
Y en ese orden, sean cuales sean los resultados que se den mañana viernes, Chile va a estar en octavo lugar. Por debajo de Colombia, Perú, Uruguay e incluso es posible que por debajo de Bolivia
Por eso es que duele mucho esta derrota en Calama, Injusta, tal vez, porque Argentina llegó muy poco al arco chileno (hizo los dos goles ante un disminuido Claudio Bravo y no inquietó nunca a Brayan Cortés), pero lapidaria en su significado
EL PRIMER TIEMPO
El gol del Fideo Di María, antes de los 10 minutos, obviamente marcó el trámite del primer tiempo.
Porque le permitió a Argentina jugar el partido que quería desarrollar en la altura: esperando a Chile con una línea de cuatro que siempre se mantuvo bien parada en el fondo y cruzando rara vez la media cancha, con volantes que tienen buen pie y manejan acertadamente la pelota y arriba, tratando de atacar por las bandas, a sabiendas que Lasarte debió improvisar con Paulo Diaz y Sebastián Vegas.
Planteado así el partido, claramente se le hizo cuesta arriba a Chile.
Porque tanto Núñez, Alexis y Charles Aránguiz, cada vez que intentaron crear una llegada hasta el arco de Emiliano Martínez se encontraron con un murallón de jugadores albicelestes por delante.
Y ni hablar de las dificultades que tenían Eduardo Vargas y Ben Brereton para hacer daño, puesto que siempre recibían la pelota en clara desventaja numérica.
Aún así, el goleador del Blackburn Rovers demostró que si le dejan una sola, la aprovecha. A los 20¨le llegó de alto una pelota de Marcelino Núñez, que parecía pasar de largo y el ariete, en un gran esfuerzo, se elevó y su cabezazo llovido se metió en el segundo palo del arco argentino.
A esa altura, Claudio Bravo ya evidenciaba problemas físicos (abandonaría la cancha antes de concluir el primer tiempo, siendo reemplazado por Brayan Cortés) y por lo que significa el capitán chileno, lo mantuvieron más allá de lo aconsejable.
Grueso error, porque al arquero del Betis le faltaron fuerzas en su pierna lesionada y a los 34´rechazó débilmente un remate de Rodrigo de Paul y se la dejó servida a Lautaro Martínez para que la mandara adentro.
Así concluyó lo que fue un sufrido primer tiempo para la Roja
CAMBIOS EN CHILE
Martín Lasarte determinó el ingreso de Gabriel Suazo por Sebastián Vegas. Justificado plenamente el cambio, porque el lateral del Monterrey no hacía un buen partido, se equivocó en una salida a destiempo en el primer, tuvo muchos problemas para controlar a Di María y además ya estaba con tarjeta amarilla.
Poco después, el técnico nacional determinó el ingreso de Mauricio Isla (que había llegado al medio día a Calama) y Joaquín Montecinos: salieron Paulo Diaz (que había hecho un buen partido) y Marcelino Núñez (que comenzando el segundo tiempo desperdició una clara oportunidad con un remate desviado).
Obviamente, el intento era reforzar el ataque por las bandas, para irse en busca del empate, dejándole el peso del trabajo defensivo en medio campo a Erick Pulgar.
En la práctica, la intención se tradujo en un dominio territorial de Chile, pero sin llegadas de verdadero riesgo al arco de Martínez. Porque La Roja sigue adoleciendo de un habilitador para sus delanteros. Esto, incluso significa que Alexis deba retrasarse en la cancha y pese a que siempre deja de manifiesto su jerarquía, el tocopillano termina enredándose, porque se pasa a uno, se pasa a dos, pero siempre hay un tercero que llega a la cobertura.
Eso termina por descontrolarlo y cometer faltas innecesarias y claramente merecedoras de tarjeta amarilla como la que le cometió a Paredes.
Por lo mismo, a medida que pasan los minutos, el equipo que va ganando se va metiendo más en el fondo (especialmente cuando comienza a sentir los efectos de la altura, como le pasó a Argentina) y el que busca el empate comienza a depender de una jugada individual para llegar al gol.
ULTIMOS MINUTOS, LO MEJOR DE CHILE
El que comenzó a ganar en los mano a mano fue Joaquín Montecinos, desbordando y sanado centros muy peligrosos.
Uno de ellos, en el minuto 82´ lo conectó muy bien de cabeza Brereton y obligó a la mejor atajada del partido por parte de Martínez.
Se jugó la última chance Martín Lasarte mandando a la cancha al goleador del fútbol mexicano, Victor Dávila. En la primera que tuvo, desbordó y metió un centro muy bueno para Brereton, lamentablemente a este la pelota le llegó muy encima y no pudo controlarla en el área.
Fue la última que tuvo Chile y la derrota, tal vez injusta, se consumó ante la decepción de un país que ve como cada vez se aleja más la ilusión de llegar a Qatar.
Ahora, la obligación que hay por delante no es menor: ante Bolivia y Brasil, como visitantes y finalmente frente a Uruguay como locales, hay que obtener al menos siete puntos para seguir con una aspiración a alcanzar el repechaje.
Porque esta noche, con la derrota ante Argentina, es indiscutible que Chile subió a la altura, para caer hasta la parte más baja de la Tabla de las Clasificatorias.
/por Gerardo Ayala Pizarro. Fotos: Twitter selecciones de Chile y Argentina
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