Con Bravo en la Banca, el Betis de Pellegrini le ganó un disputado partido al Girona

El Betis sufrió ante la atractiva apuesta visitante pero los dos tantos del pichichi verdiblanco «Panda» Iglesias, dejan invicto como local a los béticos antes de la para por la Fecha FIFA y en la tercera posición de LaLiga

Cuando Manuel Pellegrini le comunicó el viernes a Borja Iglesias que había sido convocado por Luis Enrique para jugar con España ante Suiza y Portugal, el ayudante del técnico chileno, Rubén Cousillas, le dijo al delantero gallego que para celebrarlo le marcase dos goles al Girona. Dicho y hecho por el ‘9’ verdiblanco. Dos tantos, uno en la primera mitad, desde el punto de penalti, y el segundo, en la segunda parte, tras aprovechar un regalo del equipo gerundense y batir a Juan Carlos en su salida, sirvieron al Real Betis para doblegar a un gran y valiente equipo catalán, dejar los tres puntos en el Benito Villamarín y llegar al parón por los compromisos de las selecciones nacionales en la tercera posición de la tabla clasificatoria con 15 puntos.

Confirma el Betis su gran arranque liguero, aunque el Girona cortocircuitó a los de Pellegrini y les hizo un partido muy incómodo hasta el final de temporada, con cuatro victorias de cuatro partidos disputados como local en Heliópolis en el torneo liguero.

El choque llegó igualado al descanso. Tanto en el marcador como en el juego. Porque el Girona demostró en el primer tiempo del encuentro porqué es un equipo de Primera división y porqué en los primeros cinco partidos del curso 22-23 se ha instalado en la zona media de la clasificación, habiendo sumado la mitad de los puntos en juego, siete de quince. Fue una sorpresa para todos en Heliópolis. Tanto para el seguidor verdiblanco como para los futbolistas que vestían la elástica que luce el escudo de las trece barras en el césped. Se parapetaba atrás el equipo catalán con tres centrales, dos carrileros largos y un Oriol Romeu por delante que hacía las veces de stopper. Y eso hizo incomodar al equipo de Pellegrini durante gran parte de los primeros cuarenta y cinco minutos. El Betis llegaba con algo de claridad a la zona de tres cuartos, pero el grupo de Míchel cerraba bien para sus intereses todos los huecos y el equipo heliopolitano se atascaba.

De hecho, en una de las llegadas del cuadro gerundense los visitantes consiguieron poner en el marcador el 0-1. El carrilero zurdo Miguel Gutiérrez agarraba la pelota en la zona de mediapunta y ponía un balón cruzado al corazón del área donde entraba el otro carrilero, Arnau. El canterano blanquirrojo controló la pelota y batió de disparo cruzado a Rui Silva. El meta portugués gritaba a sus defensores para que tuvieran más tensión en ese tipo de jugadas. Álex Moreno se comió la entrada de Arnau y Luiz Felipe tiró mal la línea del fuera de juego. Error en cadena y ventaja para el sorprendente Girona.

Lo mejor para los verdiblancos fue que el empate llegó pronto. A los diez minutos después. Luiz Felipe inició la jugada con un pase que cruzó el centro del campo. Recibió Borja Iglesias, que de primeras la dio de tacón para la carrera de Rodri en un hueco que dejó la defensa visitante. El extremeño se metió en el área y en el último toque el balón se le fue largo. Bernardo intentó despejar, pero la pelota rebotó en el propio Rodri que se podía quedar delante del portero Juan Carlos. No lo hizo porque el defensor colombiano le paró poniéndole el brazo en el pecho para impedirle seguir. Obstrucción que vio clara Ortiz Arias para pitar penalti. No hubo corrección desde el VAR. Parecía claro. Error de principiante de Bernardo. Borja Iglesias cogió la pelota y cuando recibió el permiso del árbitro lanzó hacia la izquierda del portero, que llegó a tocar la pelota pero que no pudo evitar el empate en el marcador.

Pero tras el empate tuvo el Girona una clara ocasión para el 1-2. Otra vez Miguel Gutiérrez como asistente. Vieron fácil sus desmarques sus compañeros y en una buena acción llegó al la altura del área local para poner un certero pase al corazón del área verdiblanca que Reinier cabeceó absolutamente sólo. El impacto del joven jugador brasileño no fue acertado y la pelota fue al centro a las manos de Rui Silva. Se salvó el Betis. Era el minuto 23 y el Betis estaba muy incómodo y con la vista nublada en el ataque. Es verdad que el cuadro heliopolitano estuvo algo más entonado en el último cuarto de hora de la primera parte, justo tras la pausa de hidratación, pero no le sirvió para irse al descanso en ventaja.

En el segundo tiempo la salida del Girona fue arrolladora. Tanto que mereció ponerse por delante en el marcador en un par de ocasiones. Porque en el minuto 51, Reinier envió la pelota al poste. Castellanos hizo un gran movimiento caído a banda en la pugna con Luiz Felipe. El ‘9’ del Girona se giró ante el defensor verdiblanco y centró al área donde el joven atacante cedido por el Real Madrid remató al poste. Luego, el propio Reinier cabeceó alto un centro desde la derecha. Ya no gritaba Rui Silva, ya incluso pitó a su equipo el Villamarín para que espabilase.

A la hora de juego logró cabecear Luiz Henrique en el corazón del área un centro de Canales que Juan Carlos atrapó con las dos manos. Pero el Betis aprovechó un clamoroso error del gran Girona que se plantó en el Villamarín para poner el partido a su favor a poco menos de veinte minutos para el noventa reglamentario. Samu Saiz entró al partido y en una de sus primeras acciones cedió mal hacia sus centrales la pelota. Con tan mala suerte que el balón le llegó a Borja Iglesias que peleó con Bernardo. El colombiano ya tenía una tarjeta amarilla y no pudo derribar al delantero gallego, que se giró y comenzó a correr como un poseso hacia el área contraria. Juan Carlos salió y el pichichi verdiblanco le cruzó el disparo para poner el 2-1, cumplir con Rubén Cousillas, marcar dos goles, dejar los tres puntos en el casillero propio y celebrar su llamada para la selección española.

Siguió llevando peligro el Girona cada vez que corría hacia el área local ante un nervioso Betis en defensa. Manu Vallejo cabeceó a gol un centro al área en el último minuto del descuento, pero el tanto quedó anulado por fuera de juego. Final del partido, 15 de 18 para los verdiblancos quizás en el peor partido de la temporada, pero que sirve para llegar al parón en la tercera posición de la clasificación confirmando el gran inicio liguero de los de Pellegrini.

/Escrito por Jesús Sevillano para ABC de Sevilla