Con Lionel Messi y Neymar como titulares y Kylian Mbappé que entró a los 10 minutos del segundo tiempo, Paris Saint-Germain se llevó una inesperada derrota de su visita a Rennes, por la 19na. fecha de la Ligue 1. Con pocas luces de sus tres estrellas, el equipo capitalino sucumbió ante el atildado conjunto de Bruno Génésio, que fue un justo vencedor. Una oportuna aparición su capitán, Hamari Traoré, le dio la victoria en una lluviosa noche en la Bretaña francesa.
El entrenador de PSG, Christophe Galtier, sorprendió a propios y extraños dejando a dos de sus máximas figuras en el banco -además de Mbappé también esperó su turno Achraf Hakimi- y también con la inclusión desde el minuto inicial del juvenil Warren Zaire-Emery, de apenas 16 años, que es la gran promesa de la cantera de la capital francesa. Juega de volante central y sorprende por su orden táctico y lectura de juego. No desentonó, pero no hizo olvidar al lesionado Marco Verrati.
Sin profundizar demasiado en los primeros minutos, el primero que tuvo que trabajar fue Gianluigi Donnarumma, quien debió arrojarse contra un palo para desactivar un remate de larga distancia de su ex compañero Arnaud Kalimuendo. Terminó siendo una constante a lo largo de toda la velada.
El líder de Ligue 1 no encontró de arranque huecos en la defensa de un Rennes que tiene sueños de jugar alguna competencia europea la próxima temporada. ¿Messi? El capitán argentino que tuvo que bajar muchos metros para entrar en contacto con el balón. Y se dio una situación curiosa: en una pelota mal entregada por él, bajó hasta el borde del área propia para recuperar el balón. Su esfuerzo fue valorado por el capitán Marquinhos, quien lo recompensó con un aplauso. Una señal de que las cosas no estaban bien.
La primera aproximación de PSG también tuvo a Messi como protagonista. Había comenzado la jugada el rosarino, pero el peligro se esfumó por una mala entrega del chico Zaire-Emery. Sin embargo, Bernat recuperó y ubicó a Leo en el borde del área. El argentino sacó el zurdazo de primera y la pelota se fue alta.
Volvió a estar cerca del gol PSG luego de una presión alta de Vitinha, que sacó provecho de una mala salida de Christopher Maurice Wooh y quedó de frente al arco. Pero su remate de derecha se fue muy desviado.
Ojo, Rennes también tuvo lo suyo. Un desborde de Adrien Truffert por izquierda encontró en el punto penal a Kalimuendo, quien remató de primera y volvió a chocar con la humanidad de un atento Donnarumma, que más tarde apareció nuevamente para embolsar un remate mordido de Traoré.
Siguió insistiendo Rennes, que no se quedó de brazos cruzados ante la pasividad del PSG. Esta vez fue Amine Gouiri, quien probó los reflejos del italiano, que volvió a salvar su arco.
En los últimos cinco minutos de la parte inicial se despertó el PSG. Lo tuvo otra vez Vitinha, tras centro de Bernat, pero su remate hizo una carambola y el belga Arthur Theate la terminó sacando al córner. Enseguida, a la salida de ese tiro de esquina, la Pulga fue servido por Neymar, pero le pegó con el empeine y le salió un globito inofensivo. Sin embargo, segundos después, Leo quedó solo en el área y su remate fue trabado de milagro por un defensor.
En el inicio de la segunda parte, PSG estuvo cerca del primero. Una jugada construida a partir de un córner, con un toqueteo largo, terminó en un centro de Sergio Ramos para Danilo, que cabeceó a la manos de Mandanda. El asistente levantó el banderín, pero se apresuró. Si el portugués acertaba el testazo, el gol hubiera sido válido. Fue apenas un espejismo.
A los 10 minutos del segundo tiempo, Galtier perdió la paciencia y mandó a Mbappé y Hakimi a la cancha -salieron el inerme Hugo Ekitike y el lesionado Nordi Mukiele-. Sin embargo, la primera acción de riesgo fue un tiro libre de Rennes ejecutado por Lovro Majer que volvió a exigir a Donnarumma.
Tanto avisó el dueño de casa que al final tuvo su premio. Un pelota profunda de Theate encontró a lateral izquierdo Truffert, quien llegó hasta el fondo, enganchó y mandó un centro bajo que se encontró con Traoré. Esta vez, el capitán pudo vencer la resistencia de Donnarumma para poner a Rennes 1-0 arriba los 20 minutos de complemento.
Enseguida tuvo el empate el PSG. Y la fórmula fue el primer y único encuentro entre Messi y Mbappé. Lanzó el campeón del mundo y dejó solo y lanzado en velocidad al subcampeón mundial, que definió fuerte, pero demasiado alto ante un Mandanda que ya lucía entregado.
A PSG le costó encontrar juego en su excursión por la Bretaña. Con Messi, Neymar y Mbappé apagados, el que dio la cara fue Juan Bernat, quien probó a Mandanda con un remate potente que el arquero sacó con las uñas al córner.
No hubo tiempo para demasiado más. PSG buscó a los empellones y sin claridad como toda la noche. Y Rennes, incluso, tuvo la chance de estirar diferencias en la última de la noche. Segunda derrota consecutiva como visitante para el todopoderoso equipo francés. La primera con sus tres genios en cancha. Lens le respira en la nuca: quedó a solo tres puntos. Pero lo que más preocupa es la falta de funcionamiento, algo que no le suceder en el duelo por los octavos de final de la Champions League contra Bayern Munich. Falta mucho -la ida es el 14/2-, pero tampoco falta tanto.
/Clarin
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