Fiel a sus características, el conjunto acerero jugó un gran partido en la cancha pirata y sigue con canasta completa: cuatro jugados, cuatro ganados
La fortaleza futbolística de Huachipato quedó de manifiesto en el primer tiempo. Cuando llegó al Sánchez Rumoroso y no tuvo el menor empacho en pararse en el campo pirata y seguir los lineamientos que pregona su entrenador, Gustavo Álvarez: jugar el juego.
Eso lo mostró a cabalidad en la etapa inicial, trasladando la pelota con mucha claridad y llegando repetidamente al área contraria.
Y con una figura excluyente como Brayan Palmezano, que si no es el mejor jugador de lo que va corrido del campeonato, por lo menos en el podio seguro que está.
Fue precisamente el venezolano el que abrió la cuenta, cuando ya se iba el primer tiempo. Culminando una jugada al estilo acerero, que nació en Castellón y llegó hasta la línea de fondo contraria. Desborde de Cris Martínez, centro atrás y empalme del talentoso zurdo para clavar la pelota lejos del alcance del Mono Sánchez.
Y la fortaleza anímica de Huachipato, que siempre es imprescindible para la conformación de un equipo ganador, quedó de manifiesto en el segundo tiempo.
Porque el Nano Diaz movió el equipo y el alza en el rendimiento del equipo fue evidente. Porque Coquimbo Unido le quitó la pelota a Huachipato, lo arrinconó en su área y le empató merecidamente con un muy buen gol de Rubén Farfán (otro que anda muy bien en este inicio de campeonato).
De ahí en adelante, si se vislumbraba un equipo que podía ser ganador este no era otro que el local. Que siguió presionando y haciendo trabajar a un excelente Castellón, bien secundado por una línea de zagueros impecables, en la que brillaron a gran altura Gazzolo y Ramírez.
Y cuando ellos no pudieron apareció un delantero (Maximiliano Rodríguez) para sacar una pelota en la línea. Había entrado en el segundo tiempo para hacer goles, pero hizo algo tanto o más importante: salvar un gol en su propio arco.
Si algo faltaba en el elogio para Huachipato es su capacidad para definir los partidos. Lo demostró en el minuto 66, cuando mejor jugaba Coquimbo Unido. Una contra rapidísima por la derecha, con Gutiérrez como protagonista, toque para Palmezano, centro con comba al área y peinada oportunísima de Jimmy Martínez para cambiarle la trayectoria de la pelota a Sanchez y cerrar el partido.
Así ganó Huachipato, un líder que algunos siguen calificando de sorpresa, pero que ya no es tal.
No puede serlo, si lleva cuatro partido jugados, cuatro ganados y cada día está jugando mejor
/por Gerardo Ayala Pizarro. Fotos: twitter Coquimbo Unido y Huachipato
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