El chileno tuvo dos oportunidades de gol para cambiar la suerte de su equipo ante el Eintracht de Frankfurt. Ahora debe ganar o ganar si quiere pasar a la siguiente ronda
Triunfo vital del Eintracht de Frankfurt (2-1) frente al Olympique de Marsella en un partido con mucho ritmo, sobre todo en la primera mitad, y muy abierto en el que ambos equipos tuvieron sus oportunidades. Kolo Muani y Kamada contrarrestaron el gol de Guendouzi y le dieron tres puntos a los alemanes que dejan a los de Oliver Glasner terceros con siete puntos, los mismos que el Sporting de Portugal y a uno del Tottenham. Por su parte, el equipo francés se queda colista con seis puntos y necesita de un triunfo en la última jornada contra el Tottenham para acceder a los octavos de final.
Mejor inicio imposible para el cuadro local, que se adelantaba a los tres minutos de partido por medio de Kamada. Gran recuperación y conducción de N’Dicka por el costado izquierdo. Dejó pasar el pase del zaguero un astuto Lindstrom para dejar sólo al nipón que, con un gran control, se internó en el área y no perdonó.
Prácticamente a los 20 minutos llegaría un susto para el Olympique de Marsella que pudo resultar definitivo para el devenir del encuentro, pero Pau López estuvo muy atento para cubrir el error de su compañero Balerdi, que con una entrega fallida plantó a Lenz en un mano a mano frente al guardameta español que despejó con la pierna el peligro.
Cinco minutos de locura
De esta última ocasión se acordó prácticamente en la acción siguiente el cuadro alemán porque Guendouzi volvería a equilibrar el electrónico tras rematar de primeras un centro milimétrico de Mbemba desde el costado derecho. No obstante, cinco minutos después, una gran asociación entre Gotze y Kolo Muani en el área con una pared devolvería la delantera al cuadro alemán. Gran definición del francés para batir a Pau López.
En la recta final de la primera mitad tuvo un par de ocasiones el Olympique de Marsella para volver a igualar la contienda, pero un expeditivo Smolcic y un atento Trapp lo evitaron. En definitiva, una primera parte de ida y vuelta y con mucho ritmo en la que el Eintracht supo aprovechar más los errores del contrario.
Arrancó el segundo tiempo con el Olympique de Marsella mucho más activo en tareas ofensivas y tomando el control del partido por medio de la posesión. Alexis Sánchez con una vaselina y con un libre directo templado y con mucha rosca estuvo a punto de marcar el segundo tanto galo, pero Trapp estuvo fino para eludirlo.
No obstante, el conjunto alemán aguantó en los últimos 20 minutos el arreón del Olympique de Marsella bien posicionado en el campo. Los de Igor Tudor apenas inquietaron la portería de Kevin Trapp en la recta final salvo alguna acción suelta de Harit y Tavares. El Eintracht durmió el partido por medio de la posesión y de esta forma se permitirá el ‘lujo’ de depender de sí mismo en la última fecha frente al Sporting de Portugal.
/Escrito por Ignacio Retana para Marca de España
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