No se puede hacer una análisis exhaustivo del rendimiento del chileno en sólo 180 segundos sobre el terreno de juego, pero sí se le notó con muchísimas ganas y la alegría propia de un futbolista que estuvo parado por más de un año tras operarse la espalda y realizar su período de recuperación en nuestro país.
Por TODOFUTBOL
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RUSIA.- Para muchos, hubiesen sido tres minutos totalmente intrascendentes. No para Mark González. Para el volante chileno fueron los más felices en más de un año lleno de sufrimientos y malos ratos. A los 87′ de partido ingresó el formado en Universidad Católica a la cancha en el primer partido del CSKA Moscú por la Liga de Rusia, que terminó con victoria para el elenco del Ejército 1-0 sobre el Rostov.
No se puede hacer una análisis exhaustivo del rendimiento del chileno en sólo 180 segundos sobre el terreno de juego, pero sí se le notó con muchísimas ganas y la alegría propia de un futbolista que estuvo parado por más de un año tras operarse la espalda y realizar su período de recuperación en nuestro país. Ingresó al terreno de juego por Alan Dzagoev en el partido que se resolvió a favor del CSKA Moscú gracias al tanto del marfileño Seydou Doumbia los 55’y que tuvo a Fabio Capello, nuevo técnico de la selección rusa, en la tribuna como espectador privilegiado del lance que vio el regreso en gloria y majestad del «Chico Mark».
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