El cuadro uruguayo plantó bandera, hizo respetar su historia, y venció 1-0 al Mengao en el duelo de ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores, un gran primer paso que deberá hacer valer en la revancha en el CDS del próximo jueves.
El partido comenzó con los brasileños tratando de tomar las rienfas del partido y avanzar colectivamente en bloque sobre el área de un rival que cerraba espacios y esperaba para contragolpear.
El primer intento llegó con un disparo lejano de Leo Fernández que no tuvo mayor incidencia, mientras De la Cruz y Gerson querian ser eje la creación ofensiva de su equipo.
Sobre los 7′ un corte en mitad de la cancha de Damián García que terminó con un remate tras ver al golero adelantado, fue otra aproximación que mostró la actitud de los jugadores en cancha.
Y el gol que hizo acallar a gran parte del Maracaná se dio a los 13′. Una estupenda contra que comenzó tras un robo de Damián García en el fondo, pasó por Leo Fernández, llegó a Jaime Báez que la cambio de banda para Maxi Silvera que asistió al medio y Javier Cabrera, parado como nueve, definió al palo y adentro para el 1-0.
Un baldazo de agua fría para los de Tite que tenían a Gonzalo Plata por izquierda muy activo e incluso fue el primero que con una buena definicióm hizo preocupar con la próximidad al empate.
Los amarillos para la ocasión estaban atentos para marcar, nunca quedaban en inferioridad númerica y obligaban a tiros a distancia con el que ejecutó Erick Pulgar y tapó Aguerre.
Y el segundo pudo llegar a los 25′ cuando una pelota que cruzó Fernández, llegó a Cabrera que se la dejó al nueve, cuyo disparo cruzado se fue cerca del palo derecho.
El árbitro Valenzuela le mostró una muy discutible amarilla a Damián García tras una falta, pero luego optó por no sacarle a De La Cruz en otra acción similar. Instantes después el que fue amonestado fue Javier Méndez.
Lo cierto es que los minutos fueron pasando y los norteños no encontraban los caminos para incomodar, algo que si hicieron a los 38′. De Arrascaeta apareció solo por la banda derecha donde no estaba Olivera y colocó un centro medido para Bruno Henrique que cabeceó en el área chica y Aguerre voló para sacar al córner, pleno de reflejos.
Por si fuera poco, Washi volvió a lucirse a los 42′ cuando otro zapatazo del Cocho, el mejor de su equipo, lo volvió a exigir respondiendo para apagar las alarmas.
Fue un cierre de primer tiempo complejo, porque Plata iba por izquierda encontando brechas y Gesrson tuvo otra chance que Darias cerró en extremis. El pitazo del venezolano cerró el primer capítulo con ventaja 1-0 para el carbonero.
Personalidad
Para el complemento Tite decidió sacar a Guillermo Varela y colocar a Wesley que se colocó casi como lateral volante atacar a Maximiliano Olivera. Un inicio donde el Mengão salió a atacar con otra intensidad.
Y pisando los 50′ se dio una acción que desató la calentura de todos los carboneros, ya que un balón al área que conectó Jaime Báez dio en la mano del chileno Pulgar y todos los visitantes pidieron la pena máxima. Ni Valenzuela, ni el VAR, decidieron otorgarlo.
Con un Damián García exhuberante, lentamente el equipo se acomodó y sostuvo la pelota con mayor efectividad, lo que obligó al entrenador local a colocar otra variante, en este caso al argentino Carlos Alcaraz por el mencionado Pulgar.
Maxi Silvera, otro que siempre estuvo dispuesto a más, se acercó al segundo con una acción individual donde encaró, se metió al área, pero cuando fue a disparar lo trabaron justo.
El aurinegro estaba sólido y concentrado, convencido del trabajo que debía realizar y que además le estaba dando resultado ante la desesperación adversaria.
Sequeira, Hernández y Ramírez fueron los primeros tres cambios de Aguirre, que reemplazaron a Cabrera, Báez y Darias, refrescando el once en cancha.
Los minutos fueron pasando y el equipo brasileño cada vez se adelantaba más, arriesgando, cambiando piezas, pero sin ser claro o poder filtrar algún pase.
Facundo Batista primero y Camilo Mayada después, se metieron al terreno de juego por Maxi Silvera y Pedro Milans, los dos sumamente agotados, agotando la Fiera sus chances de variantes.
De allí al cierre fue un monólogo del conjunto de Tite, ya que Sequeira no entraba en juego y Ramírez se dedicó más a marcar que a otra cosa.
Con el tiempo cumplido apareció un disparo de Bruno Henrique que otra vez Aguerre sacó yendo abajo, para sostener un triunfo muy valioso en Río de Janeiro.
El pitazo final selló el 1-0 de Peñarol sobre Flamengo en el Maracaná, premio justo para un planteo brillante de Aguirre llevado adelante a la perfección por sus jugadores, que le dan una buena ventaja pensando en la revancha del próximo jueves en el Campeón del Siglo, un duelo que puede valer ser semifinalista de la Copa.
/FutbolUY
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