El experimentado jugador de Deportes Temuco habló con Todofutbol sobre el momento del club, su relación con Marcelo Salas y las situaciones más destacadas de su carrera.
Temprano por la mañana y una hora antes de comenzar los entrenamientos llega en su auto Cristian Canío al complejo de Deportes Temuco, ubicado a la salida oeste de la ciudad, el cual es propiedad de la productora del presidente del club Marcelo Salas. La mañana es helada y con un sol que de a poco se asoma por la cordillera, aunque no tan fría como lo es en pleno invierno, pero de igual forma se abriga bien usando un polerón y un cuello. Su recorrido al camarín para cambiarse de ropa comienza con un afectuoso saludo al guardia y luego conversa con algunos compañeros que ya llegaron al recinto, además de bromear un poco con los juveniles que están empezando con su práctica en esos instantes.
Canío tiene 35 años y se dio el lujo de estar en varios equipos de Chile. Entre ellos figuran Audax Italiano, Everton y O’higgins, entre tantos otros, incluso formó parte de dos de los grandes, además de darse una vuelta por el extranjero. Conoce el medio local y hoy es considerado titular por el técnico Luis Landeros en el regreso de Temuco a la primera división después de 10 años. Del título que los hizo volver a la división de honor, del cual el nacido y criado en Nueva Imperial fue parte, hoy espera seguir siendo un aporte para los albiverdes.
Ya hace un año que volviste a Temuco. Regreso que ha traído muchas alegrías y que hoy los tienen en Primera. ¿Cómo te has sentido?
La verdad que muy contento de volver a mi casa. Yo me inicié acá. Feliz del trabajo que hicimos tanto en
Primera B como lo que estamos hoy en la máxima categoría. La institución pasó momentos duros. Estuvo en Tercera, a punto de desaparecer incluso y por suerte ahí apareció Marcelo (Salas) con su familia y pudieron sacar adelante todo esto y volver a Temuco a lo que es.
Hasta el momento hemos hecho un buen torneo. Hemos tenido buenos partidos. De igual a igual con los grandes y aquí estoy yo con muchas ganas al igual que la primera vez hace ya 13 años. Esta es mi camiseta. Siempre le decía a mis cercanos que un día iba a volver a Temuco.
Mencionaste a Marcelo Salas, a quien lo tuviste de compañero en la “U” hace algunos años, ¿cómo es tenerlo hoy de jefe?
Fue una suerte compartir camarín con él y es una gran personas y ahora tenerlo de jefe es algo raro a la vez pero tenemos súper buena relación. La verdad que se ha portado muy bien. Tanto él como su familia que también está ligada al club.
¿Hay algún trato especial por haber sido compañeros o por el hecho de que eres un referente?
La verdad es que no conversamos mucho, pero las veces que viene recordamos algunos momentos cuando estábamos en la «U», pero sí nos alienta mucho en el camarín. Nos dice que ganemos, que tiremos el equipo hacia arriba. Siempre está pendiente de lo que pasa. Para nosotros es importante que el presidente del equipo esté presente. Es un orgullo tanto para el equipo como para los juveniles que la figura que significa Marcelo Salas sea nuestro jefe.
¿Cuáles son los momentos de niño que más recuerdas?
Era duro. Yo le cuento a los más jóvenes siempre que yo me levantaba todos los días a las 6 de la mañana para viajar a Temuco y entrenar en el antiguo Germán Becker. Tenía que tomar la micro y de repente no tomaba desayuno o no almorzaba. Aveces tampoco tenía plata o estaba con lo justo. Incluso una vez llegué a entrenar y el utilero me preguntó que qué era lo que hacía ahí y me dijo que había entrenamiento en la tarde, así que me tuve que quedar todo el día y después hasta la noche. Son recuerdos que quedan para siempre. Jamás se olvidarán.
Una vez también, ya más grande, estuvimos tres meses sin pago. Dormimos en la sede, pero después vinieron las cosas lindas que uno disfruta al máximo.
Tomando en cuenta tus raíces mapuches, ¿qué tan importante es para ti jugar en Deportes Temuco?
Sin duda que para mí es importante. Yo soy de Nueva Imperial y siempre quise volver a mi tierra. Soy un orgulloso de llevar el apellido Mapuche y nos han tratado súper bien. Tiempo atrás era bastante desagradable porque te miraban en menos. Había bullying. En el fútbol gracias a Dios no tuve ningún problema, pero sí la sociedad te hace sentir mal, pero hoy en día cambió todo eso. Ahora en cualquier lado hay mapuches trabajando y haber paseado mi origen por todos lados es un orgullo.
En tu carrera has recorrido varios equipos, entre ellos Everton en 2008, ¿qué recuerdas de ese título que tanto marcó al hincha por la victoria frente a Colo-Colo?
Fue lindo lo que vivimos. Fue algo histórico. Muchos años que Everton no salía campeón y en su momento estuvo todo mal porque dieron como campeón a Colo-Colo y dar vuelta un resultado es muy difícil, pero tuvimos la suerte de ganarlo en Viña con toda la gente. Fue algo súper lindo. Había un grupo extraordinario. Lo mismo que está pasando ahora acá en Temuco.
¿Y hay algún momento de tu carrera donde no lo pasaste bien?
Donde puedo decir que nunca estuve a gusto y cómodo fue en Antofagasta (2012/13). Nunca estuve grato como estoy ahora acá o en Everton. En algún momento perdí las ganas de jugar. Estar lejos de mi familia afectó. Comencé a no estar citado y eso me desgastó. Si me tocara irme de nuevo lo pensaría.
¿Y en México?
Igual me fue bien. En el Atlante tuve la posibilidad de marcar algunos goles, pero después llegó otro técnico donde yo no estaba en sus planes y decidieron mandarme a préstamo, pero fue una buena experiencia.
¿Lo mismo en Argentina?
También fue algo muy lindo que me tocó vivir. Tuve la suerte de marcar tres goles en un partido con San Martín de Tucumán, siendo el primer chileno en hacerlo en primera división. Soy un orgulloso de las cosas que me ha tocado vivir. Han sido más cosas buenas que malas.
Jugaste en la «U» y tiempo después en Colo-Colo, ¿cómo te recibieron sabiendo que fuiste parte del archirrival?
Al momento me costó tomar la decisión, pero ya había pasado por hartos clubes entremedio, pero igual pensé que quizás la estadía en Colo-Colo no iba a ser grata, pero cuando llegué me junté con algunos hinchas que siempre van al estadio y se portaron bien, aunque también me recordaron que tenía pasado azul. Gracias a Dios no hubo problemas.
Hoy los dos equipos están pasando por un mal momento
Es raro verlos en las ultimas posiciones. Uno no está acostumbrado a verlos ahí. Siempre son los clubes que sacan diferencias por los planteles que arman, por toda su gente, pero esto es fútbol. Puedes tener muchos nombres pero eso no te asegura que vas a salir campeón.
Actualmente tienes 35 años y es inevitable no hablar sobre el retiro, aunque igual has dicho públicamente que quieres seguir jugando
Yo me siento bien. No he tenido lesiones graves en toda mi carrera y me preparo día a día con todos mis compañeros, al igual que los que tienen 20 años. Corro a la par de ellos. No tengo ningún problema gracias a Dios. Siempre me he preparado bien físicamente. Tengo también el apoyo de los jugadores y del entrenador.
No pienso en el retiro, tengo contrato con Temuco por un año más, pero ahí hay que ver después si me siento bien y tengo ganas de jugar.
Pero cuando ese momento llegue, ¿a qué te gustaría dedicarte?
Lo que me gusta es trabajar con niños. Puede ser en una escuela de fútbol. De hecho este año iba a ser el curso de director técnico, pero por algunos problemas que tuve no pude, aunque no pierdo la esperanza de hacerlo aquí o en otro lugar.
¿Te gustaría retirarte en Temuco?
Claro que sí. Como decía, esta es mi casa. Aquí estoy bien. Llegué de muy niño. Sería lindo retirarse con la camiseta que te vio nacer, además de que jugamos tanto los partidos de Primera B como ahora a estadio lleno y eso cualquier jugador lo desea.
¿Hay algo pendiente que tengas en tu carrera?
No me arrepiento de nada. Quizás haber sido un poco más tranquilo en algunas situaciones, pero lo he pasado bien. Cuando niño quería jugar en un grande y lo logré, también tuve algunas nominaciones a la selección, jugué en el extranjero, que para un futbolista es importante. Soy un agradecido de Dios, de la vida y de los que me ayudaron en su momento.
Han tenido un comienzo irregular de campeonato. Han ganado partidos importantes pero también se ha perdido otros. ¿Cómo está el camarín?
La verdad es que hay un buen grupo. La mayoría venimos del campeonato pasado. Ya nos conocemos bastante y los que llegaron se han acoplado bien a los compañeros. Son todos bienvenidos. Nos tratamos bien y a todos por igual y eso hace que vayamos por buen camino. Estamos muy ilusionados pese a que la competencia es dura. El grupo está fuerte.
Debido a tu extensa carrera, ¿cómo ves al fútbol chileno hoy?
Yo pensé que cuando Chile salió campeón de la primera Copa América el fútbol iba a subir de nivel, pero después pasó la situación con el ex presidente (de la ANFP) Jadue y se derrumbó todo, pero con la llegada de don Arturo Salah, que es una gran persona, creo que el fútbol chileno va a volver a ser lo que era antes que pasaran todos esos problemas, además que la selección le ha dado un plus importante.
Mira el video del hattrick de Cristián Canío a Independiente de Avellaneda el 2009:
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