En un partido en que ambos pegaron más que jugaron, los celestes, con un jugador menos, aguantaron el 0-0 hasta el final. Y en los penales ganaron 4-3
Uruguay es semifinalista de esta Copa en un partido durísimo que acabó en tanda de penaltis a favor de La Celeste. Pero ninguno mereció ganar, la verdad. Una tanda que Brasil afrontó sin Vini ni Rodry, y con fallo de Militao. El meta Rochet fue el héroe charrúa.
Fue un partido de poco fútbol y creatividad. En ese sentido, hay que destacar al madridista Endrick, que aún tiene 17 años y demostró un arrojo y potencia asombrosas. Por lo demás, muy decepcionante esta Brasil, aunque tuviera la excusa de la ausencia (sancionado) de su estrella Vinicius. Pero BNrasil no puede depender, como ayer, de un chico de 17 años. Necesita reflexionar.
La primera parte ya fue de pierna dura, muy sudamericana. Hubo dos lances fuertes entre Ronald Araújo y Endrick. Dos empujones del uruguayo, refriega de éste con Raphinha (dos del Barça…)… y tángana. Se pegaba mucho y se jugaba poco.
Endrick lo intentaba. Se tiró ‘a la piscina’ en más de una, pero es impresionante su personalidad con (casi) 18 años. La pide, se banca las entradas. ¡Y era ante Uruguay!, ¿eh? Los charrúas no perdonan, y él seguía siendo el mejor y recibiendo muchas faltas ante la inconsistencia del árbitro argentino, el típico juez que gesticula de cara a la grada y tiene escasa autoridad. ¡No hace falta tanta teatro, señor juez!
Luego, en cinco minutos, la falló Darwin; la falló Raphinha; y se lesionó Ronald Araújo. Una más. El pobre, consciente de que se acababa la Copa para él, se fue llorando y salió Giménez. El que más respiró fue Endrick. Mientras, Rodrygo estaba desaparecido…
En la segunda parte, con los mismos mimbres atacantes sobre el campo, hubo menos fricción, pero no más juego. Pocos espacios, defensas aguerridas y nada que llevarse a la libreta de importancia en las áreas. Así, hasta el 74′, en una jugada en la que Nández casi revienta el tobillo a Rodrygo. Roia clara (de VAR). Y 10 para 11 con un cuarto de hora por delante. Pero no hubo mucho más. A (casi) nadie le interesaba jugar, con La Celeste tirándose de cabeza a defender lo que fuese.
Y al final, sin prórroga, vinieron los penales… con el final que ya saben. Pobre Brasil, la que le espera…
Definición por penales
Federico Valverde (U) – Gol
Eder Militao (B) – Atajó Sergio Rochet
Rodrigo Bentancur (U) – Gol
Andreas Pereira (B) – Gol
Giorgian de Arrascaeta (U) – Gol
Douglas Luis (B) – Palo
José María Giménez (U) – Atajó Allison
Gabriel Martinelli (B) – Gol
Manuel Ugarte (U) – Gol
/Escrito por Juan Castro para Marca de España
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