Horas claves se viven en la Federación del Fútbol de Chile quienes buscan resolver el tema de las porteras.
Un verdadero terremoto se está viviendo en el Team Chile del fútbol femenino de cara a la gran final de los Juegos Panamericanos Santiago 2023 buscando la medalla de oro ante su similar de México.
Al anuncio de Christiane Endler de su adiós de la selección chilena, se suma que sí o sí, la portera y capitana debe, raudamente, volver a Francia para sumarse a los trabajos del Olympique de Lyon.
Sin embargo, el tema de los permisos complica, ya que Antonia Canales, la otra portera, fue solicitada por su escuadra, el Valencia, a tener que volver a su club, porque la jugadora titular se lesionó.
Todo esto, enmarcado en que las futbolistas deben volver a sus clubes, porque el día 31 de octubre finalizó el proceso, pese a que el entrenador Luis Mena, sostuvo que espera conseguir los permisos para que Canales permanezca en Chile. No hubo poder de gestión.
Además, el presidente de Panam Sports Neven Ilic, enfatizó en 24 Horas, que no se pueden hacer excepciones, “lo vimos en el comité ejecutivo y las reglas son las reglas. Ningún país, ningún equipo, puede reemplazar a dos de sus deportistas que tienen que retornar a sus clubes. La solución la tienen que buscar internamente”. Es decir, nada de lo que dijeron algunos periodistas sobre la convocatoria de emergencia de Ryan Torrero de Colo Colo o las arqueras de Universidad de Chile, como Natalia Campos o Gabriela Bórquez, puede llevarse a cabo.
La pregunta cae de cajón, si no se queda Antonia Canales, ¿Quién jugará en el arco de la Roja Femenina? Una interrogante que sin lugar a dudas, prende mucho más durante estas horas.
Sin embargo, La Roja tiene un nombre entre sus convocadas y que enciende la llama de la ilusión para que pueda ser la portera en el duelo decisivo ante México por la medalla de oro panamericana.
Se trata de Yenny Acuña, quien dejaría el sector ofensivo de Chile y ya no buscar convertir goles, si no evitar las intenciones de anotación de las rivales.
La razón es muy sencilla, ya que en su paso por Santiago Morning, durante un entrenamiento, Acuña mostró sus dotes para atajar y realizó, incluso, algunas voladas que al menos, podrían dejar tranquilo a Luis Mena en caso que deba apelar a aquello.
“No queda de otra, nos hemos puesto en todos los casos, pero esperemos que no. No se quien tendrá las cualidades para atajar, pero si hubiera que improvisar, trataremos de hacerlo de la mejor manera”, dijo saliendo del estadio, Yanara Aedo.
Veremos cómo la federación resuelve este verdadero problema y si que Yenny Acuña tendrá que ponerse los guantes, con la número siete en la espalda. Eso sí, preocupa que ante Estados Unidos no jugó y si bien trabajó al resto de sus compañeras, siempre lo hizo con el buzo puesto.
El duelo decisivo se disputará este viernes 3 de noviembre a las 20 horas en el Estadio Elías Figueroa Brander de Valparaíso entre Chile y México, en lo que podría ser una revancha para La Roja femenina, tras haber perdido el partido en la fase de grupos, por tres tantos a uno.
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