El flamante jugador de Inter Miami llegó a tierra asiática, donde la selección jugará dos encuentros amistosos
No es novedad lo que genera Lionel Messi en cada lugar que pisa. La conquista en el Mundial de Qatar lo puso ya sin discusiones en el pedestal de mejor jugador del mundo, y a lo largo y a lo ancho del planeta los fanáticos del fútbol se rindieron a sus pies. En cada movimiento que hace esto queda refirmado. En las últimas horas, el aluvión Messi llegó a China, donde la selección jugará el jueves 15 un amistoso frente a Australia, en Pekín.
El furor y la locura se desató en la capital china no bien el astro argentino puso pie en tierra, en vuelo chárter que también llevó a Rodrigo De Paul, Giovani Lo Celso, Ángel Di María, Nahuel Molina y Enzo Fernández. La llegada de Messi no fue del todo confortable: debió esperar un rato para atravesar migraciones, ya que hubo alguna confusión con su pasaporte. Siempre flanqueado por De Paul, el capitán argentino finalmente solucionó el inconveniente y salió del aeropuerto hacia el hotel.
El sinfín de videos que pueden verse en las redes sociales muestran la pasión de los chinos por captar la atención de Lionel Messi, hasta con gritos en español; muchas personas se congregaron con sus celulares para registrar la presencia del capitán argentino en las inmediaciones del hotel donde se hospeda la selección.
Es tal el furor por ver a la selección que los tickets para el encuentro frente a Australia se agotaron pocos minutos después de haberse puesto a la venta. La entrada más barata para el partido que se disputará en el Estadio de los Trabajadores de Pekín, con capacidad para 68.000 espectadores, costaba 580 yuanes (82 dólares, 76 euros), mientras que la más cara se vendía por 4.800 yuanes (675 dólares, 630 euros).
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