Dos goles anulados y la expulsión de Achraf Hakimi pusieron el encuentro cuesta arriba para los de Pochettino. Poco de Messi, Mbappé y Neymar
En el Vélodrome los únicos fuegos artificiales estuvieron en la grada, a pesar de que en el césped se reunían nombres como Messi, Neymar, Mbappé o Dimitri Payet. En el clásico de Francia, Olympique de Marsella y PSG empataron a cero en un choque que estuvo marcado por los dos goles anulados en la primera mitad y por la expulsión de Achraf en el60. Otro partido gris para los de Pochettino y su tridente ofensivo, incapaz de buscarle las cosquillas a Sampaoli en la pizarra.
La estampa en el Vélodrome antes de enfrentarse al PSG siempre es la misma. Bengalas, bullicio y mucha presión intentando que el ambiente sea lo más hostil posible para el equipo que lo visite. Ante Messi, Mbappé y Neymar, los de Sampaoli presionaron lo más arriba posible con la intención de sacar a relucir los problemas que pueda tener el conjunto parisino en la construcción.
El PSG no iba a sufrir la presión del equipo marsellés, pues en la transición estaban muy finos salvo en el último pase. Con Neymar de mediapunta y Di María acostado a la izquierda, encontraban con facilidad a Mbappé que tuvo alguna ocasión que desbarató Pau López.
Dos goles anulados al descanso
El VAR anuló un gol a ambos equipos. El marcador se quedó frío al descanso, a diferencia de las bengalas y el humo que adornaba el estadio y que incluso dificultaba la visión. A los 15 minutos de partido, un centro de Neymar no fue despejado correctamente por Luan Peres, marcándose en propia puerta. Finalmente el VAR decretó fuera de juego de ‘Ney‘.
A los cinco minutos también tendría trabajo, pues Milik había desatado la locura en el Vélodrome, pero el VAR también tenía algo que decir. Fuera de juego de Pol Lirola y los aficionados, que no cesaron de lanzar objetos al campo, debían guardar sus gargantas.
El segundo tiempo comenzó fatal para el PSG con la expulsión de Achraf a la hora de encuentro. Empujó a Ünder siendo último hombre y llevó en volandas al Olympique de Marsella para ir a por el partido. Los locales gozaron de oportunidades claras para batir a Keylor.
De las botas de Payet salieron las mejores jugadas. Bombardeaba el área rival y Konrad de la Fuente no supo aprovechar el regalo del francés. El PSG no asomó la cabeza en la segunda mitad, más centrado en no perder. Fiando todo a la velocidad de Mbappé, los de Sampaoli defendían cómodos.
Casi toda la segunda parte fue un monólogo del Olympique de Marsella, que quería pero no podía. No supo aprovechar la ventaja que le dio la expulsión de Achraf, aunque puso contra las cuerdas a los de Pochettino, terminó por perdonarles la vida. Las bengalas se apagaron y se apagó el encuentro, donde parece que los de Sampaoli no encuentran la fórmula para ganar a los capitalinos, ya son nueve partidos sin perder del PSG en Marsella.
/escrito por Justo Romero para Marca
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