El conjunto tico, revelación y sorpresa de Brasil 2014, se metió en cuartos de final luego de una definición desde los doce pasos en donde los griegos fallaron.
Por Sebastián Miño
smino@todofutbol.cl
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Keylor Navas fue la figura del encuentro con un penal tapado al griego Gekas.
RECIFE.- Era impensado para el mundo del fútbol que el conjunto de Costa Rica llegase a clasificar en el «grupo de la muerte», con rivales como Uruguay, Italia e Inglaterra. Pero, el cuadro de Jorge Luis Pinto hizo eso y mucho más, puesto que se adjudicó su el Grupo D de Brasil 2014 y se clasificó a octavos de final, instancia donde se enfrentó al conjunto de Grecia.
Costa Rica y los helénicos se enfrentaron en un partido en que dos selecciones que se metieron por primera vez en su historia entre los mejores 16 en el mundo, llegaron con la chance de seguir avanzando.
En la primera parte, no se sacaron diferencias en un partido que resultó ser muy parejo. No obstante, en el complemento, los ticos encontraron la ventaja en el marcador en el minuto siete de la segunda fracción tras un remate arrastrado de Bryan Ruiz que dejó estático al portero Karnezis.
Pero, las emociones se iban a prolongar hasta los 120`minutos, puesto que Papastathopoulos capturó un rebote dentro del área grande con el que batió al excelente Keylor Navas y con ello forzó al alargue del duelo. 30 minutos que prácticamente estuvieron demás, ya que ambas escuadras, no tuvieron las piernas suficientes para vulnerar nuevamente sus metas rivales por lo que llegaron hasta los lanzamientos penales.
Desde los 11 metros, Costa Rica fue más efectivo, ya que en una serie en la que no habían errado, el experimentado Teofanis Gekas perdió su penal ante el buen portero de Levante, Navas, quién tapó el envío de Gekas y dejó a un paso a los costarricenses de los cuartos de final y el encargado de llevar a los ticos hasta esa instancia fue Michael Umaña que sentenció la clasificación de los centro americanos entre los ocho mejores del certamen en la que se enfrentarán a la naranja mecánica de Robben, Van Persie y compañía.
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