Con un 3 a 0 muy contundente, los azules se quedaron con el triunfo ante la UC y de paso se mantienen como líderes absolutos del torneo. Los cruzados carecieron de precisión a la hora de definir y se alejan de la postemporada.
Christian Ayala Rojas
cayala@todofutbol.cl
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El Pato Rubio anotó dos goles y fue fundamental en el triunfo ante la UC.
SANTIAGO.- El de hoy fue de esos partidos que desmitifican eso de que los clásicos son partidos aparte y que poco importa el lugar en la tabla o como vienen jugando ambas escuadras. Y es que Universidad de Chile avasalló a su clásico rival universitario y lo liquidó rápidamente para demostrar la enorme diferencia futbolística que existe hoy en día entre estos tradicionales rivales.
A la «U» sólo le bastaron los primeros 25 minutos para liquidar el partido. En esos minutos se vio claramente la gran diferencia, no sólo futbolística, sino también anímica, entre ambos equipos. Se esperaba más de la UC, pero nuevamente entraron como dormidos, sin presionar, sin marcar más arriba, sin corretear y sin tratar de demostrar de entrada que este partido era suyo. Por el contrario, todo eso lo demostró de inmediato la «U», especialmente presionando en el mediocampo, donde los azules hicieron una gran tarea recuperando rápidamente la pelota y con eso aprovechando generar rápidamente el juego ofensivo.
Católica, con mucho toque para el lado y sin trascendencia, le costaba muchísimo llegar al arco rival y su juego cansino, aburrido y predecible fue fácil presa para la defensa azul que en esta primera parte siempre estuvo muy sólida.
Todo lo contrario con lo que ocurría con la improvisada defensa cruzada, que mostró toda su escasa jerarquía y la poca experiencia de algunos de sus jugadores. Así quedó claramente demostrado en la tempranera apertura de la cuenta para la «U» a los 3 minutos de juego, cuando primero Juan Pablo Gómez trató de salir con un pase raso y le quedó corta , lo que le permitió a Suárez interceptar el balón, pero la bola quedó en los pies de Pulgar, que inexplicablemente, en vez de rechazar trató de salir jugando con un globito ante el Canales, sin embargo no le resultó y la pelota la recuperó el argentino, quedando el rebote servida a Patricio Rubio, el goleador azul, que de primera mandó un derechazo furibundo que se metió en el fondo de las mallas. ¡Un golazo!.
Pero si ese fue un golazo, no habrían palabras para explicar el segundo de los azules. Y una vez más la defensa de la UC quedó en ridículo, cuando el Pepe Rojas, como si fuera el más hábil de los punteros izquierdo, entró dribleando dejando a los defensores en el camino, logró sacar un centro a la entrada del área y de volea la agarró Mathías Corujo, le pegó llenita y la metió en un ángulo ¡sencillamente extraordinario!.
Recién corrían 24 minutos y sería todo. La UC no se recuperó más y la «U» que pudo haber goleado, terminó relajándose y aprovechando de dosificar, entendiendo que al feente no tenía rival y que la diferencia ya era casi definitiva ¡y eso que aún faltaba mucho de partido!.
Católica, con ese bajón en el juego de la «U», logró tener alg0o más la pelota y tratar de buscar al menos un descuento y lo cierto es que si tuvo con que, porque ocasiones se creo, pero la falta de puntería y de claridad a la hora de definición les pasó la cuenta. Como dicen por ahí, hoy no le hacían un gol ni al arcoíris, además que también se encontraron con Johnny Herrera, quien estuvo en un muy buen nivel, convirtiéndose también en figura a la hora de enfrentar un par de veces mano a mano a los delanteros cruzados.
De hecho en la segunda etapa, la «U» de verdad que no hizo mucho, es más incluso se replegó y obligó a la UC a salir y que se convirtiera en protagonista, pero los cruzados como no tienen jerarquía como equipo, con la pelota a su favor no supieron como administrarla de manera más efectiva. Así, los azules aguantaron el resultado sin mayores problemas, de hecho por momentos se dedicaron a pasear a su rival, tocando mucho el balón y aderezado por los ole que coreaban exitados los hinchas de los azules, que de alguna manera, ganando este clásico se lamían las heridas de haber perdido ante el Colo Colo, el verdadero archirrival.
Y para ponerle la guinda a la tora, en un contragolpe, que comenzó con la rápida ejecución de Benjamín Vidal de un tiro libre en el mediocampo, dejó sólo al Pato Rubio, que se sacó muy fácil de encima la salida de Constanzo y con el arco a su merced puso el 3 a 0 definitivo. Un justo castigo para un equipo como la UC que no sabe a nada y de paso un premio justo para el equipo que realmente hoy quería ganar el partido.
Al final, una victoria importantísima para los azules, que veían en este partido uno de los escollos más difíciles de cara a la definición de las últimas fechas por alcanzar el título. Y además, lo mejor fue que mucho más fácil de los que se podría haber esperado, lo único que puede preocupar es que hoy se lesionaron Ubilla, Magalhaes, Gutiérrez y Pereira terminaron lesionados y algunos aparentemente de gravedad, lo que deja muy mermado al plantel, pensando que quedan cuatro fechas que serán claves. Afortunadamente, la próxima semana es fecha FIFA, por lo que tendrán una semana más para poder recuperar a su gente.
SINTESIS
UNIVERSIDAD DE CHILE: Johnny Herrera, Paulo Magalhaes, Osvaldo González, Cristián Suárez, José Rojas; Mathías Corujo, Ricardo Guzmán Pereira (74′ Benjamín Vidal), Gustavo Lorenzetti; Sebastián Ubilla (32′ Enzo Gutiérrez), Gustavo Canales (70′ Ramón Fernández) y Patricio Rubio.
UNIVERSIDAD CATÓLICA: Franco Costanzo; Juan Pablo Gómez, Matías Cahais, Erick Pulgar, Alfonso Parot (81′ Fernando Meneses); Tomás Costa, Fernando Cordero, Michael Ríos (63′ Alvaro Ramos), José Luis Muñoz; Ramiro Costa y Mark González (63′ Darío Bottinelli)
GOLES: 1-0: 2′ Rubio; 2-0: 24′ Corujo; 3-0: 87′ Rubio
TARJETAS AMARILLAS: Universidad de Chile: Corujo, Fernández; Universidad Católica: Parot, González, Costa
TARJETAS ROJAS: No hubo
ESTADIO: Nacional
PÚBLICO ASISTENTE: 30.000 aprox.
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