En un muy buen partido, el cuadro de Chillán le ganó por la cuenta mínima al Cacique en el Monumental. Los albos pagaron cara su derrota, porque hicieron todo por empatar, pero la visita y la poca fortuna se lo impidieron.
Ñublense se debe haber convertido en el rival que Colo Colo más detesta jugar. Los chillanejos se han acostumbrado a ganarle a los albos o al menos a hacerles partidos durísimos, como el hoy donde los sureños tuvieron una ocasión de gol, convirtieron y de ahí defendieron con dientes apretados el triunfo, que a la postre terminaron consiguiendo, llevándose una tremenda victoria en una cancha que para otros es sencillamente inexpugnable.
De todas maneras lo de Colo Colo fue loable. Metieron todo el partido, pusieron un ritmo frenético en el juego y realmente intentó por todos lados cambiar la historia, sin embargo se encontró con los palos, una gran defensa chillaneja y por sobre todo una jornada de ensueño del portero Nicola Pérez, que tuvo una actuación soberbia y fue gran responsable en evitar el empate de los albos.
ÑUBLENSE: UNA Y A COBRAR
El partido le perteneció por completo a Colo Colo. Los albos fueron los dueños del juego y de la pelota, también del ritmo del juego y de la posesión y eso deja al menos la sensación que el Cacique realmente hizo todo lo posible por cambiar el destino del partido. De hecho en las estadísticas finales los albos tuvieron 63% de la posesión del balón lo que demuestra la diferencia en la tenencia. Eso a veces no significa nada si es que no se llega al arco contrario, pero en esta ocasión Colo Colo tuvo al menos 7 u 8 ocasiones claras de anotar.
Ñublense en todo caso hizo un partido inteligente en la primera parte, porque si bien entró con una actitud defensiva, logró entrar en el ritmo del partido, por lo que nunca dio una pelota por perdida y los chillanejos pelearon palmo a palmo cada jugada disputada. Además el DT sureño, Jaime García, que ha demostrado una gran claridad en sus esquemas, fue lo suficientemente inteligente, para no renunciar del todo al ataque y dejarle dos jugadores arriba con distintos perfiles, como Nico Guerra que tiene rapidez y el uruguayo Hugo Silveira, que tiene muchísima potencia y una gran envergadura física.
Con eso se dio maña de complicar a Colo Colo y de hecho el único gol salió de la participación de del uruguayo, que tras recibir un pase largo de Mateos, fue capaz de ganarle el mano a mano físico a Amor, sacó un muy buen centro que fue muy bien aprovechado por Matías Moya que apareciendo por el medio le ganó a los centrales y de cabeza mando el balón al fondo de las mallas.
Y con eso le bastaría a Ñublense para ganar el compromiso, claro que tuvo que batallar bastante porque de ahí en adelante Colo Colo fue un verdadero vendaval.
COLO COLO BUSCÓ, PERO NO LE ALCANZÓ
Los albos hicieron todo lo posible por empatar al menos y estuvieron muy cerca, pero chocaron una y otra vez con la defensa chillaneja que jugó a un muy buen nivel y si no apareció en esplendor el meta Pérez que tuvo unas tapadas notables, por nombrar algunas un mano a mano que le tapó a Costa y quizás la mejor de toda un tremenda volada que evitó que terminara en gol un gran remate de Joan Cruz que iba al ángulo.
Pero las llegadas y ocasiones de gol no terminaron ahí, porque en dos ocasiones, la defensa visitante sacó la pelota desde la raya, lo que demuestra todo lo que Colo Colo hizo por lograr el empate, pero no se dio, faltó mayor calidad en el finiquito y algo más de tranquilidad en los metros finales.
Lo concreto, es que al final Ñublense se quedó con la victoria, como lo ha hecho varias veces antes en este mismo reducto, demostrando que que debe ser uno de los rivales más complicado que tiene el Cacique. Para los albos esta dolorosa derrota deja muy incierta su calidad de líder del torneo, porque le permite a Audax y a la UC acercarse peligrosamente al primer lugar y se estrecha completamente la tabla de posiciones.
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