El equipo albo cayó inapelablemente 0-2 en La Plata. Con el mismo equipo que fue muy superior ante Universidad de Chile no le alcanzó ante un equipo de la dinámica y la jerarquía de Boca Juniors
Evidenciando que tiene un equipo base en mente, Gustavo Quinteros ratificó inicialmente la misma alineación que comenzó jugando ante Universidad de Chile. Tal vez con la inclusión de Emiliano Amor como central cuando recupere su mejor firma, dando paso al traslado de César Fuentes al medio campo, donde también podría incursionar Leonardo Gil, que está un tanto atrasado en su puesta a punto, esta debiera ser la alineación con la que Colo Colo podría enfrentar la Supercopa ante Universidad Católica y posteriormente la Copa Libertadores de América.
En cuanto a Boca Juniors, por tratarse de su primer partido de la temporada, Agustín Battaglia no consideró a algunos jugadores importantes como Marcos Rojo, Jorman Campuzano, Luis Vázquez y Agustín Almendra, este último apartado del equipo tras una fuerte discusión con el entrenador. En sus puestos ingresaron algunos juveniles como Gastón Avila, Diego González, Alan Varela y Juan Ramírez.
MEJOR BOCA EN EL INICIO
Desde el primer minuto, se vio mejor parado a Boca Juniors en la cancha del Estadio Uno de La Plata. Especialmente porque Colo Colo evidenció muchos problemas de marca en el medio campo, donde los volantes xeneises encontraban mucho campo libre para llegar hasta el área de los chilenos.
Sólo Esteban Pavez ofrecía resistencia, pero carecía de la compañía necesario de Vicente Pizarro y Gabriel Costa para contener al medio campo boquense
Ya en la primera jugada del partido pudo llegar la apertura del marcador: lo impidió Brayan Cortés, volando espectacularmente hacia su izquierda para sacar un tiro libre de Villa que se colaba en un ángulo.
Por el mismo sector llegó libre «El Pulpo» Diego González para sacar un remate bajo desde la entrada del área que dejó sin chance alguna a Cortés.
Uno a cero a los 10 minutos, que era el claro reflejó de la superioridad de Boca Juniors sobre el vicecampeón del fútbol chileno.
EQUILIBRA EL JUEGO COLO COLO, PERO SIN LLEGADAS
Curiosamente, mientras más arreciaba la lluvia, fue amainando el vendaval que era Boca en los minutos iniciales.
Influyó que el equipo argentino sacara un poco el pie del acelerador y también que Bolados y Solari bajaran a colaborar en la recuperación de la pelota.
Esto hizo que Gabriel Costa pudiera aparecer en el partido, pero por razones obvias cuando levantaba la cabeza sólo veía a Lucero arriba, ya que los dos punteros – por mucho que lo intentaran -no podían estar en la marca y en el ataque. Especialmente, cuando al frente hay dos marcadores tan eficientes como lo son Advíncula y Fabra, que nunca fueron superados por los atacantes albos.
Por lo mismo, Juan Martín Lucero tuvo que luchar siempre contra los dos centrales – Izquierdoz y Ávila– y pese a que no se entregó nunca, tampoco tuvo muchas posibilidades, por no decir ninguna, de quedar en posición de gol.
En consecuencias, mientras Agustín Rossi tuvo un primer tiempo muy tranquilo, Brayan Cortés tuvo que estar siempre muy atento a las llegadas de los delanteros argentinos y cerca del final del primer tiempo evitó el segundo gol al tapar un remate a quemarropa del Toto Salvio.
REFUERZA QUINTEROS EL MEDIO CAMPO
Consciente que en ese sector de la cancha estaba perdiendo el partido, Gustavo Quinteros le dio mucha más marca al medio campo, subiendo a César Fuentes e incorporando a Leonardo Gil para acompañar al hasta entonces solitario Esteban Pavez.
La apuesta significó la incorporación del juvenil Bruno Guitiérrez como central por uno de los volantes, Vicente Pizarro y con la salida de Bolados se trasladó Pablo Solari a la derecha, escapando así de la marca impenetrable de Advíncula.
La mejoría fue inmediato y Colo Colo en los primeros diez minutos llegó al área de Boca Juniors más que en todo en el primer tiempo.
Pero, al adelantarse el equipo albo en la cancha, dejó espacios muy amplios para la velocidad de los atacantes argentinos y uno de ellos, Nicolás Orsini pudo poner la segunda diana al recibir perfectamente habilitado por Varela y desviar por centímetros ante la oportuna salida a achicar de Cortés.
LO CIERRA ZEBALLOS
El partido fue transcurriendo en condiciones muy similares a lo que fue la tónica del segundo tiempo. Controlando la pelota Colo Colo, pero sin ninguna aproximación de peligro al arco de Rossi.
La única llegada de peligro real fue un tiro libre de Gil, que terminó en la red pero hubo una clara posición adelantada de Falcón y Lucero.
Y de otro lanzamiento de pelota detenida llegó el gol que cerró el partido: el juvenil Ezequiel Zeballos, que llevaba sólo algunos minutos en cancha ejecutó un tiro libre desde la izquierda, a uno treinta metros del arco de Cortés y su impecable lanzamiento clavó la pelota en el ángulo superior derecho del arco albo.
A NIVEL INTERNACIONAL ES OTRA COSA
Esa es la conclusión principal que debe sacar Gustavo Quinteros de este partido. Obviamente, nada nuevo, pero duele comprobarlo en carne propia.
Porque, con lo que a Colo Colo le alcanza y le sobra a nivel local (lo demostró el viernes ante Universidad de Chile) no es suficiente para imponerse a rivales que tienen otra dinámica y otra jerarquía.
Boca Juniors es un muy buen ejemplo de los rivales que va a tener que enfrentar el Cacique en la Copa Libertadores. Desde ese punto de vista, es bueno que le haya pasado lo de esta noche en La Plata.
Porque está claro que el entrenador albo tendrá que trabajar muchísimo, en todo sentido, si no quiere quedarse otra vez tempranamente en el camino en el torneo continental.
Hay tiempo para trabajar. Pero no se puede desperdiciar ni siquiera un minuto más
/por Gerardo Ayala Pizarro. Fotos: Twitter Colo Colo y Boca Juniors
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