Para este virus Monumental no hay antídoto: Colo Colo 4 Universidad de Chile 1

Haga lo que haga la U, pareciera estar condenada a sucumbir cuando enfrenta a los albos en su estadio. Esta vez el fracaso del planteamiento de Escobar fue absoluto y lo pagó con una goleada que incluso pudo ser mucho mayor

Experiencia v/s juventud

Esta fue, claramente, la apuesta inicial de Gustavo Quinteros y Domingo Escobar, respectivamente.

Por parte de Colo Colo, ningún sub 21 a la cancha y sólo un jugador que no había estado en Superclásicos: Juan Martín Lucero, por razones obvias pues llegó recién este año a Chile, pero en Argentina con la camiseta de Vélez enfrentó a Boca, River y todos los grandes del país trasandino.

Y en la U, todo lo contrario: tres juveniles (Morales, Osorio y Tapia) y siete debutantes en un Superclásico.

UNA «U» QUE INTENTÓ SER VALIENTE

Lo anticipó su entrenador y los primeros minutos demostraron que no eran puras palabras.

Porque Universidad de Chile entró a pelearle mano a mano el medio campo, con el trabajo impetuoso, pero desordenado de Brun y Seymour y el chico Osorio con libertad para juntarse con Junior Fernandes y ser ambos los alimentadores de Ronnie Fernández y el Chorri Palacios.

Así, antes de los 5 minutos ya tuvo una llegada muy clara por la izquierda, que obligó a que se desdoblara Pavez para llegar justo a sacar la pelota al córner, cuando Palacios esperaba con la servilleta puesta.

Sin embargo, quedó una vez más en evidencia que con ser valiente no siempre alcanza

COLO COLO APROVECHA TODO LO QUE LE DAN: 3-0

Colo Colo respondía con mucha intensidad y buscaba mucho por la derecha, donde Pablo Solari desde un comienzo le ganaba el mano a mano a Morales.

Pero, la apertura de la cuenta llegó por el otro costado a los 10 minutos: remate de Suazo desde una punta del área y lamentablemente para el juvenil Bastián Tapia, en su intento de rechazar el remate la terminó clavando en su propio arco.

No obstante, para ratificar que «el queso estaba por el otro lado», dos minutos más tarde el «Pibe» Solari encaró por la derecha a Morales y sorpresivamente sacó un remate alto que sorprendió a Galíndez. La pelota dio en el travesaño, el arquero quedó en el suelo y Gabriel Costa tuvo que tocarla para convertir el segundo gol.

Y no se demoró nada Esteban Pavez para marcar el 3-0. Jugada individual entrando al área y derechazo alto que se clavó en un ángulo.

NI SIQUIERA DE PENAL (Y REPETIDO)

Tuvo de inmediato Universidad de Chile la gran oportunidad para descontar y meterse en el partido.

Una falta innecesaria de Emiliano Amor contra Ronnie Fernández, en una punta del área y Roberto Tobar de inmediato cobró el penal.

Uno que no falla casi nunca, el Chorri Palacios, falló: remate muy anunciado a la derecha de Brayan Cortés y el arquero llegó para tapar abajo. Claro que con los dos pies adelante de la raya.

Por eso, el VAR le dio la revancha al goleador de la U.

Y volvió a fallar. Esta vez engaño absolutamente a Cortés, pero la pelota pegó en el poste izquierdo.

LA U INTENTA CAMBIAR SU DESTINO

Comenzando el segundo tiempo, Escobar determinó que entrara Luis Felipe Gallegos por Felipe Brun (un debut en los clásicos para olvidarlo) y Jeyson Vargas por Junior Fernandes (¿era el indicado a salir?).

Por momentos, pareció que podía darle resultados. Porque equiparó el duelo en el medio campo y se acercó con cierta peligrosidad al arco de Cortés.

Aparte, que entró a meter pierna fuerte para intentar contener la superioridad alba en los duelos individuales. Especialmente en el caso de Morales y Solari

PERO COLO COLO LO MATA DE CONTRA

El problema para la U es que supo solucionar su problema mayor, tal vez porque con este plantel actual no tenga solución: las facilidades que da su bloque defensivo.

Inteligentemente, Gustavo Quinteros decidió replegarse un poco, dejar venir al adversario y liquidarlo de contra.

Así, antes del cuarto de hora, lo tuvo dos veces Juan Martín Lucero, que apareció de gran forma en el segundo tiempo. Una de aquellas fue gol y lo anularon por posición adelantada y en la otra el remate la salió al cuerpo de Galíndez.

Pero, el propio Lucero se vistió de asistidor y le metió a los 12´de esta etapa un pase perfecto entre líneas a Gabriel Costa. El peruano entró absolutamente solo y se la colocó junto a un poste al arquero azul: 4-0 y larga media hora por delante.

OTRO PENAL Y OTRA VEZ  PALACIOS

Y la tercera fue la vencida. Con gran personalidad, Cristian Palacios volvió a  pedir que le dejaran el penal y esta vez si que derrotó sin apelación a Cortés con un violento remate bajo a la derecha del arquero.

La falta, faltita en realidad, se produjo a los 70´ luego que Aránguiz (recién ingresado) exigiera a Cortés con un remate llovido y cuando Ronnie Fernández iba por el rebote, Gabriel Suazo lo desestabilizó con un empujón.

Si podía esperarse una reacción de Universidad de Chile, esta se diluyó pronto con la expulsión de Camilo Moya (segunda roja que le muestran la roja en el Monumental9 y además Quinteros tomó sus resguardos incluyendo a Matías Zaldivia para defender los minutos finales con línea de tres

Por lo mismo, de los minutos finales hay que rescatar un tiro libre del venezolano Santos que sacó Galíndez con gran atajada y la expulsión del juvenil Tapia, por una falta siendo último hombre, que seguramente pensó que este iba a ser una jornada de ensueño y terminó en pesadilla

DEFINITIVAMENTE, NO HAY ANTÍDOTO PARA ESTE VIRUS

Todo lo anterior, demuestra que haga lo que haga Universidad de Chile en el Monumental no le da resultado.

Porque Domingo Escobar se la jugó por una idea arriesgada y claramente lo suyo fue un fracaso.

Los jóvenes por los que apostó (salvo Osorio en alguna medida) no le respondieron y el mismo se equivocó en la forma como paró a sus jugadores en la cancha.

Porque Brun y Seymour naufragaron ante la presencia de Fuentes, Pavez, Gil y la ayuda de Costa. Fueron superados numérica y futbolísticamente y en ese sector Universidad de Chile perdió el partido.

Además, dejó a Marcelo Morales librado a su suerte en un duelo mano a mano con Pablo Solari, que lo perdió de ´principio a fin.

Ahora, no sólo los juveniles fueron responsables de la debacle. Porque jugadores de tanta experiencia como el arquero Hernán Galíndez, por ejemplo, jugaron con un nerviosismo inexplicable y en el caso particular del arquero, jamás le dio confianza a su defensa. Todo lo contrario

Aparte, que tampoco tuvo fortuna Universidad de Chile. Porque los tres de arriba no hicieron un mal partido, pero no pudieron en la puntada final. Ya está dicho lo del doble penal de Palacios, Ronnie Fernández estrelló un cabezazo en el palo y Junior obligó a una gran atajada de Cortés para sacarle un remate que se clavaba en un ángulo.

Pero, salvo ese tercer penal, la pelota no entró. Y no hay más que hacer

Por eso, este nuevo clásico, terminó en goleada (que pudo ser incluso mucho mayor) y con olés bajando desde todos los sectores del estadio.

Para Colo Colo, otra jornada victoriosa y a la que ya está acostumbrada en los Clásicos que se juegan en el Monumental.

Y para la U, lo de siempre. Para este virus tan exterminador que lo afecta desde hace más de 20 años, definitivamente no tiene antídoto, haga lo que haga, no puede encontrar una vacuna

por Gerardo Ayala Pizarro. Fotos: twitter oficial Colo Colo y Universidad de Chile