La selección de Bélgica refrendó su condición de favorita a pelear por la Eurocopa 2020 al remontar (1-2) este jueves a Dinamarca en Copenhague, dentro de la segunda jornada del Grupo B. Kevin De Bruyne, delantero del Manchester City, jugó sus primeros minutos en la Euro, tras la lesión en la cara durante la final de la Champions y resultó vital.
El técnico de los Diablos rojos, Roberto Martínez, tuvo que tirar de su figura después del gran primer tiempo danés. Los locales, que venían de perder el estreno ante Finlandia con el susto de un Christian Eriksen que poco a poco se recupera, estaban obligados a sumar y a los dos minutos encontraron el 1-0. Una mala decisión de Denayer en la salida del balón terminó en el gol de Poulsen, con la presión arriba de Dinamarca. Así hicieron la vida imposible a la mejor selección del mundo según la FIFA.
Los daneses apretaron para no dejar pensar al rival y se movieron bien en ataque para encontrar muchos espacios. Maehle hizo estragos y Braithwaite no tardó en apuntarse a las ocasiones. Atrás, Kjaer hizo un marcaje perfecto a Lukaku.
La etapa inicial estuvo marcada por el homenaje a Eriksen en el minuto 10, luego del colapso que sufrió ante Finalndia y ante la noticia de que deberá ser operado.
A Dinamarca le iba a fallar la gasolina por el desgaste. La reanudación trajo al césped a De Bruyne y el ariete del City, con ganas de sacar la amargura de esa final de Champions perdida con el Chelsea sin poder terminarla, no tardó en lucir. En una buena jugada de Lukaku, De Bruyne hizo lo que quiso con el control hasta dar el pase de gol a Thorgan Hazard. Roberto Martínez detectó el sufrimiento danés y metió a Eden Hazard y Witsel. Así, en el minuto 70, De Bruyne fusiló de primera, con la zurda y en carrera, el 1-2. Dinamarca tardó en reaccionar, pero se quedó con el tramo final. Courtois, con un amago de lesión, tuvo que hacer sus primeras paradas del torneo, y Braithwaite rozó el gol en un par de ocasiones, en especial un cabezazo, en una entrega danesa sin premio.
PAISES BAJOS
En el cierre de la jornada de este jueves, Países Bajos venció 2-0 a Austria, y tomó el liderazgo en soledad del Grupo C de la Eurocopa y sacó pasaje a los octavos de final. El encuentro se jugó en Ámsterdam donde el local ratificó que es una de las sensaciones del certamen al plasmar su segunda victoria al hilo.
El equipo naranja fue muy intenso en lo primeros diez minutos y tuvo un penal a favor luego de una falta de David Alaba donde lo pisó a Denzel Dumfries. Luego de la revisión con el VAR, el árbitro decidió sancionarlo y Memphis Depay convirtió desde los doce pasos.
Luego locales buscaron marcar el segundo, pero no estuvieron finos en la definición, incluso con dos chances desperdiciada por Depay: primero recibió un pelotazo que controló en el área, pero remató afuera; luego solo frente al arco luego de una gran asistencia de Wout Weghorst.
Superada la primera media hora, el encuentro entró en una meseta y en el final de la etapa inicial el elenco naranja volvió al ataque para intentar ampliar la ventaja, pero no logró concretar. Tuvo una clara a los 40 minutos, cuando tras una combinación de pases por el sector derecho, Georginio Wijnaldum no tuvo precisión en el último toque y la pelota dio en un defensor contrario.
En el comienzo del complemento Países Bajos siguió con la iniciativa y luego de un tiro de esquina Matthijs de Ligt se perdió un gol al lado del arco.
Hasta que a los 67 minutos llegó el segundo, luego de que Donyell Malen recibió solo por la izquierda y habilitó hacia el medio a Dumfries.
En el final Austria tuvo una con un tiro de media distancia de David Alaba que no generó peligro.
Sin tiempo para más, Países Bajos consiguió su segunda victoria al hilo en el certamen y al igual que Bélgica accedió a los octavos de final.
El lunes el conjunto naranja visitará a Macedonia del Norte y Austria hará lo propio con Ucrania, en una final ya que ambos tienen tres puntos y de ellos saldrá el segundo clasificado de la zona.
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