La “U” y la UC, pese a los requerimientos de sus técnicos, todavía no suman refuerzos. Aparte del regreso de Opazo, Quinteros pretende un “9″ y un reemplazante de Rojas.
Tras un largo receso de un mes, el fútbol criollo regresó con la disputa de los cuartos de final de la fase regional de la Copa Chile. Con el retorno del Campeonato Nacional a la vuelta de la esquina, el jueves 6 de julio, el mercado de invierno está frío, por no decir congelado.
El que reclamó esta semana fue Mauricio Pellegrino, en la previa del partido del miércoles contra O’Higgins. El entrenador le manifestó a Azul Azul que requiere un lateral izquierdo, ante la lesión de José Ignacio Castro, y un centrodelantero, pues no lo convencen Cristian Palacios ni Nicolás Guerra.
Para que la concesionaria “laica” pueda incorporar, todo indica que debe consumarse la venta de Darío Osorio, lo cual no gusta al DT. “Si tengo que esperar vender a un jugador para reforzar al equipo, mal estamos, porque no depende de nosotros”, alegó.
La “U” volverá al ruedo en el torneo antes que el resto de los clubes, ya que debe ponerse al día el 28 de junio frente a Universidad Católica. La “Franja”, salvo el posible regreso de Clemente Montes, ya que el Celta no hará uso de la opción de compra, tampoco presenta fichajes hasta el momento.
La salida de Mauricio Isla deriva en la necesidad de un carrilero derecho, con Guillermo Soto en la órbita, pero sin novedades hasta ahora. Ariel Holan también aboga con Cruzados por un volante, con César Pérez como alternativa frente a la negativa de Pablo Galdames.
Blanco y Negro ya cumplió uno de los deseos urgentes de Gustavo Quinteros. A la espera de que firme su finiquito con Racing, Óscar Opazo volverá a Colo Colo tras seis meses para reforzar un lateral derecho sin dueño.
Pese al retorno del “Torta”, el DT del “Cacique” presiona por otros dos fichajes. El primero sería un reemplazante para Marco Rojas y el segundo, un “9″ que pueda aportar la cuota goleadora que no han podido anotar Darío Lezcano ni Leandro Benegas.
El argentino-boliviano fue claro ayer en conferencia de prensa. “Me gustaría incorporar un delantero más”, avisó, agregando luego que “no hemos sumado la cantidad de goles que queríamos, depende de los dirigentes hacer el esfuerzo”.
El que ya tiene a su centroatacante es Mario Salas, ya que Joaquín Larrivey fue anunciado como refuerzo de Magallanes. Otro movimiento de este frío mercado fue el paso de Joe Abrigo de Coquimbo Unido a Palestino.
En las bancas, aparte de la llegada del “Comandante” a los “carabeleros” en sustitución de Nicolás Núñez, hubo otro cambio de timón. Juan José Ribera es el nuevo entrenador de Curicó, después de la salida de Damián Muñoz.
/Publimetro
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